JOSHUA
Viernes, último día de clases de la semana, y para mí, uno muy importante, hoy vuelve Enzo.
Anoche nos quedamos hasta las tantas hablando por llamada esperando a este momento, él ya estaba abordando cuando terminamos nuestra conversación, son casi 12 horas de vuelo, y quiso hacerme saber que ya estaba volviendo.
La profesora Chávez está explicando no sé qué, sobre la historia del país, pero, aunque mi cuerpo este presente en el salón de clases, mi mente y mi vista están en el cielo que se ve a través de la ventana.
— ¿Ya es mañana? Que rápido pasaron los días, ¿No? —escucho que Olivia habla con Adri sobre su partida al centro.
Mi mente vuelve a la tierra y me quedo escuchando la conversación que están teniendo, me costó asumir que no lo vere en al menos 5 o 6 meses, pero es para su mejoría, así que me alegré al saber que tomó esta decisión, pero insisto, me costó muchísimo hacerlo.
—Hoy vuelve Enzo, ¿Verdad? —pregunto Liv girándose hacia mí, yo solo me quede viéndola.
—Si. De hecho, debería aterrizar en unas horas.
—Sigo sin creer que no me hayas querido decir nada Josh —puso sus brazos sobre su pecho en desaprobación.
—No estaba listo, Liv —me encogí de hombros y ella pareció relajarse.
— ¿Lo conocía? Por más que intento no lo recuerdo —soltó Adri de repente.
—Solo de vista, quizás sea por eso —le corto y me incomodo un poco—. Nadie supo que estuvimos juntos.
—Ah, vale —volvió su vista al frente quitándole importancia a la charla.
Me le quedé mirando un momento más, desde antes del accidente que no lo veía tan sonriente, extrañaba demasiado esa sonrisa amplia que tiene, últimamente todo le ha ido bien y estoy feliz, no ha tenido problemas con su padre en un tiempo y hasta su madre esta mejor y con mucho trabajo. Aunque si él se va, nadie estará para Darlene, ella es fuerte y puede hacerle cara a Augusto, pero lo que viene después es el problema.
La campana suena lo que indica el receso y los 4 vamos a nuestro lugar de siempre con algunas chuches y cosas para comer, Bruce me pasó unas cuantas gominolas y una botella de Coca-Cola y se puso a mi lado, Liv y Adri quedaron de pie frente a nosotros.
—Ya volvemos —anuncia Adri tomando a Liv del brazo.
—Vale —asentimos Bruce y yo.
Mi mirada quedo clavada en el jardín del instituto cuando Bruce me tomó por sorpresa, parecía nervioso.
—Josh... Necesito tu ayuda —estaba sudando— ¿Qué le gusta a Liv? Sabes que se acerca su cumpleaños y quiero darle algo que pueda gustarle.
—Pues no se Bruce, me agarras frio.
— ¿Quieres mi chaqueta?
—No, bobo, que me agarras desprevenido, sin pensar.
—Ah, vale.
Es bobo, confirmamos.
—A ver, ella, aunque no lo admita, un poco cursi es... —pienso un momento— Podrías darle una foto de ustedes con algún chocolate...
Él se queda viendo a la nada.
—O quizá también... espera ¿Qué tanto te gusta?
Hace poco Liv me hablo de algo que le gustaría que hicieran, pero no estaba segura de sí Bruce sería el indicado para eso.

ESTÁS LEYENDO
Extraño
RomanceJoshua estuvo enamorado toda su vida de su mejor amigo Adrien, pero el destino les impedirá obtener su libertad. ¿Qué harías Si el amor de tu vida se olvida de tí?