Esta es la segunda temporada de la historia "Vacaciones"
¿Qué ocurrirá cuando TN y Fargan se separen? ¿Podrán soportar más de 1000 kilómetros de distancia o todo lo que han construido a lo largo de un intenso verano se irá al garete?
Como diría Rubi...
Desperté sobre el pecho desnudo de Fargan y recordé la causa por la que estábamos desnudos en mi cama. Observé su rostro y él, como siempre, sonrió sin abrir aún los ojos. Empecé a besar su barbilla y su cuello mientras él me rodeaba con sus brazos. Sentía el calor de su piel sobre la mía, podía oír los latidos de su corazón en el silencio de mi habitación.
F: Has dormido muy poco... - Dijo aún sin abrir los ojos. - Debes estar muy cansada... - Bromeó haciendo referencia a la deliciosa sesión de sexo que me había regalado después del almuerzo.
TN: Jajaja, no sé de qué me hablas. Es que no puedo dormir... quiero ver lo que hay en la mesa.
F: Pues sí que estás impaciente... tú que no perdonas ni una sola siesta jajaja. - Por fin abrió esos preciosos ojos marrones y pude encontrarme con ellos. - Hacemos algo... nos damos un baño, te pones algo cómodo y te enseño lo que he traído, ¿vale?
F: Tus pijamas son la mar de cómodos... jajaja. No vamos a ningún sitio, ratilla, quiero estar a solas contigo. ¿No te apetece comerte todas esas chucherías que me has enviado?
TN: Suena bastante bien... - Sonreí ronroneando sobre su pecho.
Salí desnuda de la cama y me dirigí al baño. Puse a calentar la ducha y mientras el agua corría vi llegar a Fargan tras de mí. Babeé al verle totalmente desnudo. Me detuve a observar su cuerpo, sus tatuajes. Y, como no, me sonrojé cuando me encontré con su sonrisa maliciosa al ver que me había quedado embobada observándole.
Ni que decir tiene que la sesión de sexo que vino después fue de lo más delicioso. Cada encuentro con Fargan me hacía temblar de placer, me hacía sentir plena, pero a la vez me hacía desear el siguiente con aún más ansias. Reconozco que quedaba satisfecha pero... una vez volvía a pensar en el encuentro empezaba a necesitar el siguiente, estaba enganchada a él.
Cuando salí de la ducha busqué mi toalla y me enrollé en ella. Después busqué otra para él que, tras secarse el cuerpo y el pelo se la enrolló alrededor de la cintura dejando su torso visible. Tomé un bote de crema y le pedí que me la pusiese, lo cual derivó en un más que agradable masaje encima de mi cama. Después, obedeciendo sus indicaciones, fui a buscar un pijama y finalmente me decidí por este:
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Reconozco que me gustaba tener a Fargan nervioso todo el tiempo... sentir su mirada clavada en mí y sus insinuaciones continuas. Me gustaba gustarle, tanto como para hacerle perder el control. Me gustaba porque era justo lo que él provocaba en mí.
Él se colocó los boxers y los pantalones deportivos, dejando su torso desnudo. Sentí su mirada clavada en mí unos instantes antes de bajar por la escalera. Estaba nerviosa. Nunca había sido demasiado materialista, especialmente desde que tenía el dinero suficiente para no desear nada demasiado tiempo antes de tenerlo pero todo cuanto venía de Fargan me hacía ilusión por encima de lo demás, así que deseaba ver qué era lo que se encontraba encima de la mesa.
