No lo vi en todo lo que restó del día, ni siquiera a la hora de la comida y según su hermana a esa hora siempre estaba, lo esperamos por media hora pero no había señales de él y David ya tenía hambre, al igual que yo.
—Mejor ya coman niña—dijo Pachita saliendo de la cocina—, Carlos no vendrá.
— ¿Segura?—me mordí el labio— ¿No sería mejor esperarlo?
—No chula—negó con la cabeza—, si fuera a comer ya estaría aquí, siéntense.
—De acuerdo—suspiré ayudando a David a sentarse.
Comimos mientras el niño me platicaba sobre su escuela y sus amigos, así como de su fijación y deseo de convertirse en charro como sus tíos, se veía sumamente emocionado por ello y feliz de que su madre haya aceptado que su tío Carlos le empezara a enseñar a montar, según el niño, su tío era un hombre muy divertido y cariñoso, cosa que fue todo lo contrario esa mañana, no entendía su molestia ante mi presencia pues su hermana tenía razón en desconfiar de él, me enfoqué en el pequeño niño y en cerciorarme que no dejara comida en el plato. La tarde fue más o menos igual, el niño vio una película y después se puso a jugar con unos caballos y sus jinetes mientras yo leía algunas cosas del trabajo, cuando me di cuenta el niño se había quedado dormido por lo que lo cargué y lo subí a su habitación, me dirigí a su balcón en cuanto lo dejé acostado, a lo lejos se veía el ruedo y dentro de él estaba Carlos montando a caballo al parecer tratando de hacerlo más rápido cada vez, no traía camisa y desde ahí se podía ver que su torso estaba perfectamente formado, imaginé lo que sería tocar sus músculos y besar esos labios que aunque eran bastante antojables también servían solamente para quejarse por mi presencia, sacudí de mi mente toda idea subida de tono con él y me dirigí a mi habitación, la cual quedaba junto a la de David, acomodé mis cosas y después seguí leyendo.
~~~~~
Pasé la mayor parte del día practicando en el ruedo, había llegado un amigo por lo que decidí sacar una botella de tequila sentándonos bajo la sombra de un árbol a brindar, le conté sobre la llegada de esa mujer al rancho y se la describí a la perfección, pude notar un brillo de deseo en sus ojos que me molestó, no entendía por qué.
—Pues preséntala ¿No?—pidió mi amigo arqueando una ceja y con una sonrisa que de inmediato hizo que la sangre en mis venas hirviera.
—No—respondí de inmediato—, digo, ella viene a trabajar, no puede distraerse de eso.
—Claro—no parecía convencido de mi excusa, y eso era, no quería presentársela, la quería para mí.
Espera ¿Qué? ¿Para mí? No, nada de eso, no quería ni estar cerca de ella, su sola presencia me molestaba, me dolía por la desconfianza de mi hermana, me incomodaba, y también me volvía loco de deseo por besarla, definitivamente no la quería cerca.
Mi amigo se fue después de un rato dejándome ahí solo, pensando en esa mujer que estaba en casa cuidando de mi sobrino, comencé a beber directamente de la botella, no sé si fue por lo rápido que la bebí, por el sol o porque no había comido nada desde la mañana pero me sentía muy mareado, así que decidí volver a la casa pues además ya estaba anocheciendo y tenía mucha hambre.
~~~~~
Le di una ducha a David y después le di de cenar para que ya se acostara a dormir, yo también haría lo mismo para levantarme temprano y cumplir con todo, subimos a su habitación donde llamamos a su madre para que le diera las buenas noches, después le leí un cuento y el pequeño charrito se quedó dormido, me había dicho que así le gustaba que le dijeran así que comencé a llamarlo así, lo dejé profundamente dormido y me dirigí a mi habitación, quería ducharme y dormir de inmediato, salí envuelta en una bata y saqué un pijama del cajón cuando escuché un fuerte ruido en la planta baja, bajé las escaleras a toda prisa viendo que se trataba de Carlos quien había chocado con la mesa de la entrada tirando varias cosas y al parecer él mismo se había lastimado, y cómo no si la base de la mesa era de concreto.
![](https://img.wattpad.com/cover/289092135-288-k836711.jpg)
ESTÁS LEYENDO
A Rienda Suelta ©
RomanceUna vida libre y sin compromisos, sin deseo o intención de cambiarlo, una familia unida y una carrera en la charrería consolidada, dinero, mujeres y fiestas ¿Qué más podría querer? Nada, o eso pensaba Carlos hasta que la llegada de una hermosa mujer...