Tiene unos ojos color almendra que me hacen sentir tonto, que me hacen babear cada vez que me mira, y a pesar que hemos chocado pocas veces, cada vez que nuestras miradas se cruzan, hace que mi corazón se derrita un poco más.
Tiene una sonrisa que encandila. Esa clase de sonrisas que no se pueden ocultar, que necesitan ser libres. Esas sonrisas que son capaces de iluminar al mundo, de devolver la esperanza e incluso, de curar enfermedades.
Tiene una voz que nunca me cansaría de oírla. Una voz dulce y fuerte al mismo tiempo, que me da seguridad y que me hace sentir confiado de todo.
Tiene una actitud hermosa. Esa clase de personalidad que enamora, que dan ganas de no separarte ni menos olvidar. Ese comportamiento del cual te aferras y que no quieres soltarte nunca, que me divierte y me hace reír por todo lo que hace.
Tiene una cara de oso que no dejaría de mirar jamás. Esas facciones que expresan tanta ternura que hace que se me suba el azúcar. Esa carita que no me cansaría de acariciar ni por un momento y con la cual me gustaría despertar todos los días, para poder mirarlo.
Tiene esas inseguridades tontas, esas inseguridades que llegan a ser adorables. Ese miedo infundado sobre su peso, que no es lindo y tantas cosas absurdas más. Esos miedos comunes, pero que yo daría todo para poder salvar y curar, para ahuyentar sus fantasmas y sus demonios. Para decirle que desde hace mucho tiempo que no encontraba a alguien tan lindo, tan tierno, tan hermoso en el amplio sentido de la palabra.
Y Luis también tiene un novio.
Un novio que no soy yo.
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One Shots / Un relato, una historia
Teen FictionAquí estarán mis One Shots, donde cada relato narra una historia de vida.