Por la tarde, después de la comida, acompañé a mi hermano y a Helena a lo que al parecer fue un recorrido turístico, se supone que irían ellos solos, pero mamá recordó que Hoseok era muy malo para la geografía desde que iba a la escuela.
Cuando regresamos estaba agotado, aquella chica tenía incluso más energía después de haber dormido tanto tiempo que Jimin en las mañanas cuando corría a abrazarme. Ya era tarde, nuestro padre ya estaba en casa para cuándo llegamos, leyendo en periódico frente a la mesa de la cocina, como siempre solía hacer. Mamá había hecho un pastel para darle la bienvenida a Hoseok.
Durante la noche pensé mucho en si enviar aquel mensaje. Palabras como: "¿El vuelo estuvo bien?" "¿Llegaste bien a casa?". Solo palabras que habrían podido motivar una conversación que ya no tenía sentido tener a este punto. Borré muchas veces el mensajes y terminé por alejar el celular y tirarme a la cama.
Al final me quedé dormido.
{...}
¡Cinco de la mañana! ¡Eran las malditas cinco de la mañana!
Tan malditamente temprano y mi hermano había entrado sin ningún tipo de cuidado a gritar los buenos días y abrir las cortinas para que, según el, los rayos de sol mañaneros entraran en la habitación, aunque en realidad todavía no salía el sol y no había luz que pudiera entrar por la ventana que no fuera la artificial.
——¿Qué te pasa imbécil? —dije en un tono ofendido y a la vez desconcertado por lo temprano que era.
——Pensé que ya no harías esto mientras estuviéramos aquí —dijo Helena con el pelo alborotado y una cara de sueño parada en el marco de la puerta.
——¿Hacer qué? —le pregunté mientras mi hermano hacia estiramientos que más bien se parecían a los de una iguana cuando quiere pelear.
——Solo se que un día tu hermano vino muy temprano a mi departamento y desde entonces es fan del yoga y la meditación —dijo tallando su ojo derecho con su muñeca, de un lado a otro.
Y si, al parecer mi hermano se había convertido en un tipo aterrador hombre fiel de la meditación y el yoga, ciertamente esas prácticas eran relajantes, pero no a las cinco de la mañana, a esa hora yo solo quería dormir.
La historia del yoga, eso según Helena fue ya que Hoseok estaba muy estresado debido a su reciente trabajo, el trató de buscar algún método que lo relajara, al final terminó encontrando el yoga y la meditación como la mejor solución a sus problemas y luego también involucró a su novia en aquello. El problema no era que adoptara poses de gato entumido y que pareciera que estaba, en ocasiones, tan concentro en invocar a algún angel o demonio, el problema era que ahora aparte de Helena, también quería que yo participara. Al parecer sería como una terapia, para regresar la paz y salud a mi mente o algo por el estilo, no le presté mucha atención cuando lo explicaba, y me despertó en la maldita madrugada solo para eso.
Estuvimos un rato afuera los tres, fueron tal vez dos horas.
Cuando regresamos a casa nuestros padres ya habían despertado, mi madre estaba en la cocina y mi padre atendiendo una llamada en la sala mientras al mismo tiempo veía el noticiero matutino.
Durante el desayuno hablamos de muchas cosas, y cuando digo eso me refiero a que los demás hablaban mientras yo asentía de vez en cuando y reía por algunos comentarios que hacía Hoseok. Mi hermano y su novia se quedarían hasta el año nuevo y luego regresarían a Londres.
Los siguientes días, me hubiera gustado que fueran como el primer día, no lo fue. Todos se preguntaban porqué el animado Choi Jungkook se había vuelto todo lo contrario a su personalidad habitual, mucho se podía escuchar en los pasillos sobre nuestra ruptura, también se preguntaban el motivo de que no hubiera regresado a clases la segunda semana. Jimin no preguntó nada, creo que era porque de alguna manera ya podía imaginar la situación y decidió no tocar el tema por un tiempo.
Durante los primeros días, la imagen de Jungkook en el aeropuerto me atormentaba dentro de mis sueños, el diciendo adiós y yo sabiendo que nunca lo volvería a ver.
Después solo eran noches en las cuales no podía dormir bien. Mi hermano decidió mover la hora de levantarse dos horas después para que pudiera dormir mejor, lo cual agradecí demasiado.Después del domingo Hoseok tampoco mencionó nada más sobre el asunto de Jungkook. Supe que la señora Choi, que ahora había cambiado su apellido nuevamente a Cha, se había mudado a un lugar no muy lejos de su antigua casa, podía suponer porque lo había hecho. No necesitaba un lugar tan grande siendo la única persona que viviría allí.
No supe nada más de Jungkook, era como si nunca hubiera estado aquí, ahora era un simple recuerdo de una época hermosa que pasamos juntos. Ni siquiera Jiyu vino a mi nuevamente después de que se fue. El se había convertido en aquella brisa que había pasado sin avisar para descontrolar todo, como el viento hacía con las hojas de otoño, luego se desvaneció y dejo las hojas en calma como lo habían estado antes, solo que en un lugar diferente, desordenadas.
Aquel tiempo que pasó después de romper, se sintieron como años aunque solo había sido un par de meses, dicen que todo pasa más lento en las últimas dos estaciones del año.
Todo seguía igual que antes. Jimin seguía con esos saludos cálidos y ese buen humor de siempre. Jiyu y yo volvimos a ser simples compañeros que casi nunca hablan, no porque se odien, sino porque no tienen nada que decir al otro. Mi madre seguía preocupándose demasiado, mi padre seguía diciendo que no se preocupara demasiado. Hoseok seguía con ese aura inmaduro aunque ya era una persona independiente y con una carrera, Helena era una persona más en mi vida que había entrado un día y no creía que fuera a irse, mi hermano estaba realmente enamorado está vez.
Los profesores seguían siendo insoportables, el viento seguía soplando y las nubes seguían cubriendo el cielo amenazando con llover. Después de Jungkook todo y todos estaban igual, el único que no seguía igual era yo.
Borré su número por miedo a que mi fuerza de voluntad no fuera lo suficientemente fuerte. La persona que fuí antes de el era una persona diferente, la persona que fui en mi tiempo con Jungkook también era diferente, y la persona que era ahora era una combinación de ambos con algo más sumado.
Solo el tiempo sería testigo de todo, solo el tiempo haría que las heridas se curarán, dejando los buenos y malos recuerdos como cicatrices.
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Todavía Tenemos Que Pedir Perdón
FanficPorque las personas cambian. Porque las personas olvidan. Las disculpas nunca llegaron Empezada: 14.09.2021