XXI. Te odio.

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La lluvia seguía cayendo, para ese punto de la noche más intensa, haciendo que se formara un fuerte ruido blanco al caer miles de gotas sobre los techados, autos y calles.

A Jungkook no le importó la tormenta, solo salió del hospital dejando atrás las advertencias del personal de salud que ahí estaba. Y Taehyung lo vió salir, aún cojeaba pues sus rodillas dolían pero tampoco eso le importaba. De igual forma había salido, sin hacer caso a los oficiales de policía intentando detenerlo.

--¡Jungkook espera! -gritó haciendo que el mencionado le hiciera caso y se volteara en seco hacia el.

--Mi hermano acaba de morir y me pides que te escuche.

--Solo quédate aquí, te diré lo que pasó, ¿Está bien?

--No, porque se que no fue un accidente, ya me dijeron que fue un suicidio, tú estabas con el, debiste detenerlo de hacer tan estupidez -su voz era fuerte, más intensa de lo que nadie había escuchado antes.

--Lo sé, es mi culpa. El se acercó a ese acantilado. Ni siquiera estaba asustado.

--¿Acaso no pensaste en detenerlo?

Lo hice, intenté hablar con el y convencerlo. Pensé en ir por el pero en realidad no se que me pasaba -su voz se quebraba más a cada palabra.

--Si claro, con tu frialdad seguro fuiste la mejor ayuda -soltó irónico.

--Jungkook, sabes que no es así.

--Te odio, a ti y a tu estúpido comportamiento. Te odió -se dió la vuelta rápidamente y siguió avanzando en la dirección opuesta.

--Jungkook, ¡No te vayas! -fue tras el una vez más, pero fue cuando estaban en medio de la carretera que un brillo cegador a un lado los hizo detenerse.

La lluvia era tan intensa que el conductor no pudo ver a los dos cuerpos en medio de la carretera hasta que ya estaba a tan solo escasos metros, invisible cambiar de dirección o frenar para no impactar contra ellos.

Todos en el lugar dónde vivían supieron sobre el accidente, se desataron muchos rumores sobre lo que había pasado. La familia Choi, una de las familias con más dinero ahí, se había encargado de disfrazar la verdad para proteger a su hijo en coma y la memoria de su hijo mayor fallecido. Pagaron a las autoridades para dar testimonios falsos a los medios sobre el hecho que ha si tomado relevancia a una velocidad increíble.

La historia que conocían los demás era muy diferente a los que había pasado. Tres chicos, que habían ido a escalar la montaña en cuanto las vacaciones de verano dieron inicio, habían bajado del lugar en cuanto empezaba a llover, uno de ellos cayó por la inestabilidad del camino mojado haciendo que se lastimara sin ser de gravedad. Los otros dos chicos lo llevaron al hospital para que curaran sus pocas heridas, pero a causa del mal tiempo, tuvieron un accidente de tráfico, en el cual el mayor de los tres había fallecido y los otros dos habían presentado heridas graves. Uno de ellos, un chico de cabello castaño y un mechón de cabello color blanco, había sufrido contusiones leves por un golpe fuerte en la cabeza. El otro, había quedado en coma durante un tiempo corto, pero se había sabido que a pesar de ello estaba bien.

Cuando Jungkook no despertó del coma, vió a Jiyu, su tan querida mejor amiga a lado de su cama, luego vinieron sus padres y el doctor, le hicieron muchos chequeos para comprobar que todo estuviera en orden. Apenas los doctores dejaron de hacerle tantas pruebas, a su mente vino una sola persona, sabía que su hermano había muerto, le dolía, pero a pesar de ello, aún había alguien que le preocupaba más que el mismo.

--¿Dónde está Tae?

--¿Por qué te preocupas por el? -preguntó con fastidio-. El está bien, muy bien diría yo. Escucha, el está en casa ya, apenas tuvo un par de heridas a pesar de que seguro el fue quién propuso lo de ir a la montaña. Se fue a casa y no te visitó ni una sola vez, yo soy quién estuvo aquí.

--Seguro no lo dejaron venir, sus padres suelen protegerlo mucho, en especial su mamá. Me alegra que esté bien.

--Eres tonto Jungkook, por el no te deberías preocupar, tu hermano murió y tú apenas despiertas. El es de quién menos te debes preocupar -tomó su mano pero Jungkook de inmediato apartó la suya.

--Ya se que Yeonjun murió, lo entiendo, no hace falta que me lo recuerdes porque créeme que pienso en ello a cada segundo. Pero aunque yo estuve en coma, te aseguro que no soy yo quién está peor en este momento. Tae, puede ser más débil de lo que aparenta.

--No puedo contigo -tomó su bolso y sin decir nada se fue de la habitación.

Jungkook soltó un suspiro, quería ver a Taehyung, era a quién más quería ver en ese momento, pero no podía sin que lo dieran de alta, no lo dejaban ni salir de su habitación. Así que solo quedaba esperar a que Taehyung lo visitara o a salir del hospital para visitarlo el.

La verdad sobre lo que había pasado solo lo sabían pocas personas, la familia Jeon, la policía, Taehyung y más tarde su hermano, al igual que una parte del personal del hospital. Pero al parecer, no toda la familia Jeon sabía la verdad. Y fue cuando una doctora, que conversaba con Jungkook mientras hacia algunas pruebas para matar el silencio descubrió algo anormal en lo que era la versión del chico sobre cómo habían pasado las cosas.

--¿Jungkook? ¿Puedes contarme bien lo que pasó esa noche?

--Habíamos ido a la montaña, mi hermano se cayó pero cuando veníamos al hospital tuvimos un accidente por la lluvia -contestó con un tono caído al recordar los sucesos, aunque tal vez no eran del todo recuerdos y la doctora estaba consciente de eso.

--Ya veo -solo dijo eso y al terminar su trabajo de despidió, yendo con rapidez a informar sobre esa plática a sus padres y un par de doctores que sabían sobre el caso.

















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Todavía Tenemos Que Pedir PerdónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora