Epílogo

1.9K 227 70
                                    

VALENTINA

Estaba terminando de ponerme mis pendientes, un regalo que me había hecho Juls hace años para Navidad, y me los pondría hoy, ya que es un día muy especial para mí, me encuentro completamente nerviosa y ansiosa. A pesar de que me había preparado, el no saber que zapatos utilizar provocó una batalla en mi mente, toda mi atención estaba enfocada en eso, Juliana no estaba aquí, prometió que estaría a aquí, a mi lado. Juliana siempre era la que me ayudaba en ese tema, su estilo y gusto en la moda eran increíbles. Y por acostumbrarme a eso, hoy no podía escoger un maldito par de zapatos.

Estaba por ponerme los que creía iban mejor con mi vestido cuando me entró una notificación anunciando que el servicio de transporte llegaría en 30 minutos.

–Ahhh. –Me quejé– Se suponía que hoy era mi noche.

Estaba refunfuñando cuando ví la puerta del cuarto abrirse. Era Juliana. Lucía agitada, pero eso sí, se miraba más hermosa que nunca.

–Lo siento mi amor, el vuelo se atrasó y luego yo me atrasé porque de alguna forma los fans se enteraron que venía hoy y se encontraban en el aeropuerto esperando por una foto, y sabes puedo decirles que no. Se que es tu noche, y traté de hacer todo lo posible...

–Juliana, bebé. –Me acerqué tomando su mano. –Tranquila ¿si?, ya estas aquí, y eso es lo que importa. Ahora ven y salúdame como se debe. –Se acercó a mi y nos unimos en el beso que llevaba esperando por quince días.

–Te amo, y te extrañé mucho. Sabía que no debía ir, nunca me hubiera perdonado si no llegaba a estar el día de hoy aquí.

–Hey, no te preocupes de más, todo está bien. Aunque he de confesarte que me estaba volviendo loca en decidir qué zapatos usar.

–Tenía el presentimiento que eso iba a pasar, te conozco tanto, mi amor. –Finalizando con una sonrisa mientras se dirigió a su maleta y sacó una caja, que por lo que había dicho, suponía eran un par de zapatos. –Los vi y no me resistí a comprarlos. Creo que van muy bien con tu vestido.

Tomé la caja y la abrí. Eran unos preciosos zapatos de diseñador que combinaban perfectamente con mi vestido.

–Gracias bebé. Siempre sabes lo que necesito. Me encantaron. –Dije dándole un beso. –Me conoces mejor que nadie.

**

Mi pierna subía y bajaba repetidamente. Me encontraba nerviosa, no podía dejar de pensar en el discurso que tendría que dar en un par de minutos. Pararme frente a un escenario era mi muerte.

–Val, mi amor, tranquila, recuerda que es tu noche. Todos los que nos encontramos aquí estamos por y para ti. – Juliana me conocía tan bien, cualquiera pensaría que era lo lógico después de tantos años juntas, pero a mi no dejaba de sorprenderme, desde sus detalles a la forma de leerme la mente, sabía que era mi persona, mi amor, y mi vida.

Dejé un pequeño beso en sus labios en forma de agradecimiento, ella me lo devolvió pero fuimos interrumpidas por la persona al micrófono.

–Buenas noches a todos, es un honor para mi ser parte de esta noche tan importante, hoy presentaremos el Albert Lasker Award por investigación médica a la doctora Valentina Carvajal.

Todas las personas que estaba en el salón se pusieron de pie y dieron una ronda de aplausos, mientras caminaba a el escenario vino a mi mente el recuerdo cuando le dije a Juliana que estudiaría medicina.

Flashback

Faltaba un mes para iniciar la universidad, no le había compartido a Juliana la decisión que había tomado, y no era porque no confiara en ella, necesitaba estar segura de mis planes. Lo había analizado por horas mientras escribía en mi diario, cosa que Juliana me había enseñado. Y por fin había llegado el momento, hoy durante la cena se lo comentaría. La había invitado a su lugar favorito, teníamos tantas ganas de salir a cenar y el doctor recién nos había dado el alta para comer cualquier cosa, bueno siempre con medida, ya que solo tendríamos un riñón cada una para el resto de nuestra vida.

Con amor, JulianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora