𝓘𝓷𝓼𝓸𝓶𝓷𝓲𝓸 [𝐂𝐡𝐢𝐟𝐮𝐲𝐮 𝐱 𝐎𝐜] [𝐌𝐨𝐨𝐧 𝐚𝐧𝐝 𝐒𝐮𝐧 #𝟏]

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"Cien eternidades"

La brisa del frío otoño golpeaba mis mejillas, dejando un color rojizo en mi nariz y pómulos, quizás también en mi barbilla. Mis brazos cruzados mirando el pavimento sobre el suelo, moviendo un poco mis pies, mirando mis botas sin plataforma.

Otro día que esperaba a Chifuyu en el estacionamiento de casa, iba a clases, pero aún yo no podía ir, necesitaba algo de reposó aún. Haber tenido dos cirugías en menos de veinticuatro horas dejo demasiado débil a mi cuerpo. No obstante, perdí mucha sangre, aunque recibí una transfusión de sangre y fue de ayuda, no quitaba el hecho que mi cuerpo de nuevo estaba jodido.

—Hola, cielo. —Escuche al rubio, acercándose a mí.

Levanté mi cabeza para dirigir mi vista a él, su uniforme puesto y debajo de ese saco azul marino tenía una sudadera gris. Una mezcla extraña que solo a él le quedaba bien, un saco con una sudadera de bajo.

Su cabellera abundante de colores dorados, se movía levemente por la brisa del helado otoño que estábamos viendo. Sus ojos conectaban con los míos, como de costumbre, una conexión a la cual estábamos acostumbrados, pero nos encantaba.

—¿Cómo te fue? —Me acerque a él, abriendo mis brazos para abrazarle.

A decir verdad, me sentía como una esposa que esperaba a su esposo del trabajo y era extraño. Me recibió en sus brazos con una ligera sonrisa. Pronto se cumplirían casi dos semanas del trágico treinta y uno de octubre.

—Ya sabes, lo mismo de siempre. —Me rodeo con sus brazos y caminamos a las escaleras.

Había algo en Chifuyu... Se que era la tristeza que le generaba la partida de Baji, pero siento que había algo más.

Esto era así, por las tardes después de comer lo ayudaba con sus tareas, cuando terminaba le daba un té de manzanilla preparado por mí.

En mi caso comía poco, intentaba comer las porciones completas que me servían en mi plato, pero no tenía apetito, hacía mi mejor esfuerzo como se lo prometí a Chifuyu, era consciente que, si no me comía al menos más de la mitad del plato, mi cuerpo no iba a recuperarse rápido.

Chifuyu le gustaba últimamente peinar mi cabello y cuidarme más. Era más sobreprotector de lo usual, sabía a qué se debía.

No pudo proteger a sus mejores amigos, uno falleció y su novia casi muere, es claro que inconscientemente se haya vuelto más sobreprotector conmigo.

Él se encontraba encima del sofá de la sala de mi casa, yo estaba en el suelo, siendo peinada por Chifuyu.

—Voy a dejar la ToMan. —Informo el rubio, atando mi cabello con una coleta baja.

Me gire a verle, pero recibir un regaño por parte él.

—Espera no te muevas, ya casi termino de peinarte. —Me obligó a girar la cabeza.