Mientras Noel retira la cantidad de veneno posible, los chicos están frustrados. Ven que sus hermanos siguen desmayados.Noel: Ya hice lo que pude, necesito a las chicas para hacer lo demás.
Mizu: Noel, si pudiste eliminar el veneno de la barrera, ¿por qué no puedes eliminar el de sus cuerpos? -le pregunta con sus ojos rojos.
Noel: Verán. El veneno que poseen los demonios no es muy fácil de eliminar cuando este perfecciona su habilidad; una vez que se filtra en tu cuerpo, para que se elimine totalmente se necesita de magia de brujas y hadas, más la mía -les explica-. Además, recuerden que cuando Duncan me atacó no morí porque me ayudaron ambas especies a remover el veneno totalmente, por eso necesito a las chicas. Iré a Australia a buscarlas. Ustedes cuídense, estos asesinos deben pensar en atacar muy pronto -asienten. Noel abre un portal-. Cristhofer y Ronald estarán llegando una vez que vean que no hay demonios por acá. Quédense en este aquelarre mientras tanto -dicho esto, entra al portal.
Lance: ¿Mizu? -ve que está en un rincón-. No te atormentes, hermano. Tú no tienes la culpa -lo abraza-. Son los riesgos de la vida que nos tocó. Ellos estarán bien -ve a sus hermanos desmayados como si estuvieran en coma.
Rai: Es verdad, bro. Tú hiciste lo que pudiste -le acaricia la cabeza-. Tenemos que ser fuertes.
Mientras tanto, en una oscura cueva en la montaña los guerreros hablan con Duncan.
Marin: Perdón, mi señor. Me pasé un poco, quizás estos chicos mueran -le dice arrodilla.
Duncan: ¿Bromeas, Mar? -alza una ceja-. Pusiste en una situación comprometedora a los elegidos que más estorban; Nasim es listo y analítico, Eidan, un kitsune; y Ilan es un dolor de cabeza. Me alegra que los hayas dejado así -ella curva su sonrisa.
Jasmin: Sin embargo, Señor, el ángel intervino antes de que Marin terminara su trabajo. ¿Qué hacemos ahora?
Duncan: Toya, Kaito, ¿ya está todo en orden? -las chicas voltean encontrándose a sus hermanos guerreros-. ¿Ya Wilson está listo? -los dos asienten-. Bueno, que él se encargue de distraer a los otros mientras ustedes entran en acción. Y ustedes, mis princesas, encárguense de Báthory y Scott; esos dos no deben llegar a donde están esas pestes. ¿Les quedó claro a los cuatro?
Los cuatro: Sí, mi señor -dicen al unísono. Duncan desparece mientras tanto.
Kaito: Así que pusiste en coma a tres de esos. Felicidades -le habla a Marin, ella sonríe.
Toya: Bueno, Marin, cuéntanos. ¿Cuánto tiempo les das? -dice riendo y Cruzándose de brazos.
Marin: Obviamente el ángel les debió ayudar, pero no puede solo, mi veneno es fácil de filtrarse. Si les fue bien, por así decirlo, tienen hasta el amanecer -ellos asienten.
Jasmin: Bueno, espero que Wilson no se exceda, ya que quiero quedarme con sus cabezas de trofeos -habla sádicamente.
Toya: Descuida, hermanita. Él dijo que como regalo te las iba a traer. Recuerden que Wilson tiene una defensa de acero, esos niños no sabrán ni qué los atacó -asienten-. Bueno, vamos a posiciones -se van de la cueva.
Mientras tanto, un encapuchado va llegando al aquelarre, sube su aura a propósito para que los chicos sientan; se dan cuenta y ven hacia la ventana, no ven a nadie.
Rai: Vamos a ver qué es -salen de la casa, en eso unos misiles oscuros van hacia ellos. Lance crea una pared para defenderse, los proyectiles la derriban como si nada-. ¡Allá! -ven al encapuchado. Este se quita la capucha y máscara de oso, ven que es un muchacho de unos 23 años, ojos color miel, tez blanca, cabello platinado, fuerte y alto, tiene un piercing en la nariz y está vestido como un cazador.
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Los Elegidos: Nuevos Enemigos (Libro II)
FantasiRai, Nasim, Ilan, Mizu, Lance y Eidan, finalmente aceptaron su destino como los elegidos; esto los ha llevado a pelear contra demonios, espectros y otras criaturas sobrenaturales. Estos chicos han tenido que unir fuerzas con Cristhofer Báthory (vamp...