Los Elegidos: Nuevos Enemigos (Libro II)

Capítulo 41: Vínculo.

La energía de Cristhofer lanza lejos a Romeo y todo lo que tiene al frente; destruye el avión, los muertos vivientes y desconcentra al brujo oscuro. Noel protege a todos con una gran barrera; Ben está detrás Cristhofer, está ilseo, ya que el vampiro envió sus ondas de sonido hacia el frente.

Mizu: ¿Qué coño le pasa a Cris? Nunca lo había visto así, parece otra persona —habla con asombro.

Ronald: Su poder se salió de control, su instinto asesino se apoderó de su cuerpo, mente y alma, dejando salir a ese sombrío vampiro —les explica—. Seguro el detonante fue ese infeliz de Romeo, tal vez usó a Ben para provocarlo.

El brujo le lanza hechizos a Cris, pero el vampiro crea una barrera sónica que lo protege, voltea a ver al brujo sonriendo sádicamente, le lanza una onda de sonido que lo aturde, luego corre hacia él y le da infinitos golpes; usa su poder eco voz, atacando al brujo, este crea un escudo que es destruido como si nada; las ondas sónicas atrapan al brujo, rompiéndole sus órganos desde adentro. El hombre ahora yace en el suelo, de su boca, oídos y ojos, sale mucha sangre. Ben y los demás están sorprendidos, nunca habían visto a Cris en ese estado.

Romeo: ¿Qué le pasó? Parecía que no mataba ni una mosca. ¿Cómo puede tener ese tipo de poder? —dice asombrado. El vampiro lo ve, yendo hacia él—. Infeliz —chocan sus puños, se separan, y Romeo le da un puñetazo, pero Cris ni se inmuta.

Cristhofer: ¿Eso es todo? —dice con una voz gruesa, aterradora, ronca y perversa—. Tienes suerte de que esté de buenas —le rompe el brazo derecho y la pierna izquierda—. ¿Qué pasa?, ¿no soportas el dolor? Ahora sabrás lo que tus víctimas sentían, maldito —sus ojos rojos se dilatan. Pone sus manos en ambos oídos y crea ondas de sonido que le rompen los tímpanos al hombre kanima.

Romeo: Aaaaaah —grita de dolor—. Nooo. Aaah, maldito, aaaah —se retuerce en el suelo, su sanación no es tan rápida—. Eeress unnn monstruoo —le dice con dificultad.

Cristhofer sonríe, lo eleva con su poder, encerrándolo en una esfera, luego la hace explotar con él adentro, matándolo al instante; Romeo queda totalmente descuartizado. Los chicos no pueden creer lo que ven, su Cristhofer se ha convertido en un temible monstruo.

Noel: Ustedes seis, quédense dentro del escudo. Ronald, tú y yo iremos a distraerlo, mientras que las chicas recitarán el hechizo para traer a Cristhofer de nuevo —ellos asienten.

Rai: Viene hacia acá —todos voltean y ven que Cris viene caminando poco a poco hacia ellos—. Muchachos, Cris es nuestro amigo, no podemos lastimarlo —están contra la espada y la pared. Luego observan que Ben corre y lo abraza por su torso desde atrás.

Ximena: No puede ser. Ben, déjalo, ¡te puede matar! —intenta ir, pero Lance la detiene—. Por favor, déjame ir, Lance. ¡¡Lo va a matar!!—habla desesperada.

Eidan: Esperen. El aura de Cris está disminuyendo, y su olor vuelve a ser el de antes —les avisa.

Ben: Cristhofer, por favor, despierta. Mírame —le habla en tono dulce y el vampiro voltea, lo agarra del cuello sin hacer presión, los chicos intentan ir—. ¡No vengan! —les grita—. Cris, regresa, te lo suplico. Vuelve a ser el de antes, ese chico dulce, que protege a los demás, que ayuda a evitar que el mundo sea destruido, que ama a sus amigos, ese que odia ser un vampiro asesino, ese que bajo la luna llena me dijo que me quería, el que me llevó a París y me hizo pasar la mejor noche de mi vida, ese que me regaló este collar y me pidió ser su novio. Por favor, mi Nick, regresa —Cris abre sus ojos, lo suelta y se empieza a agarrar la cabeza.

Cristhofer: Aaaah, mi cabeza, me duele —exclama sacudiéndose, ya su voz no se escucha como antes, pero su poder aún no está estable—. ¡No soy un monstruo, no soy un monstruo! —dice agitado.