𝓡𝓤𝓛𝓔𝓡

𝔗𝔥𝔢 𝔉𝔬𝔩𝔡

🦅Ryevost, Central Ravka near the Sokol River 🦅

Pov Katya

—¿Me observará todo el camino General?—pregunte sin quitar la vista de mi lectura.

—Posiblemente, ¿le molesta?

—Me incómoda que me examine, ¿algo que guste compartir?

bajo mi libro permitiéndome por primera vez en el viaje observarlo.—¿Seguirá fingiendo que no existo?

—Mis disculpas no era mi intención,
simplemente me apetecía una lectura para el viaje.—asegure acomodando mi kefta

Observó la carátula de libro y bufo—¿The Witch of Duva?, no tenía idea que le agradaban los cuentos infantiles.

—Los cuentos tienden a contar una parte de la historia General y la mayoría de estos se cumplen.—asintió y se recostó sobre el asiento cerrando sus ojos, durante un largo rato intenté concentrarme nuevamente en la lectura sin embargo fallé terriblemente, la duda aún seguía—¿Cree que funcione?—frunció el ceño aún con los ojos cerrados—Hablo de la misión en el esquife.

—Debería—aseguró abriéndolos—El ultraligth es nuestra última esperanza para cruzar a salvo la Sombra hacia Novokribirsk, confió que has escogido a los mejores grisha para la misión.

—Así es, Zoya se encargará de ser la Vendaval principal, Galina y Kotsya iran para tranquilizar a los soldados y Yelena como la Inferni encargada del esquife, solo falta que los soldados seleccionados sean capaz de mantenerse tranquilos...Sigo insistiendo que sería más seguro si yo estuviera dentro del esquife, la gente estarían más tranquila y segura—acepte

—La prometida del príncipe Vasily abordó del esquife hacia Occidente, no tienen sentido que la realeza aborde un esquife solo para la recolección de insumos.

—Permítame corregirlo General, no soy la prometida del príncipe ravkano

—Aún, ¿Ansiosa por escapar de las garras de los Lantsov?

—En lo absoluto; mi lealtad está con el Rey Alexander

—Podrías escapar si así lo deseas—aseguró serio.—por un tiempo lo pensé huir y comenzar desde cero, ser una persona completamente diferente, sin títulos, riquezas... alguien normal y aunque por mucho que deseara eso no podía dejar a mi gente.

—Lo sé, pero no deseo escapar, tengo un rol que cumplir.

asintió de acuerdo—¿No esta cansada de ser un juguete más del Rey?

—¿Y usted?, para ser sinceros usted parece encantado, ¿le gusta ser el muñequito del Rey?

Mi pregunta fue interrumpida con unos golpeteos en la puerta del carruaje.