By: @Moross_
«Te haré llorar cuando me escape, llévame de vuelta porque quiero quedarme. Me doy cuenta de que llego demasiado tarde, y te mereces a alguien mejor.
-Save your Tears, The Weeknd y Ariana Grande.»
Inicio: 21/Nov/2021.
Final: 21/Dic/20...
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No sé cuánto tiempo había pasado, pero ya comenzaba a desesperarme de no poder mover ni una sola parte de mi cuerpo.
Estaba divagando en mis pensamientos cuando escuché la puerta abrirse lentamente, y luego cerrarse de la misma forma.
¿Qué día es hoy? Maldición, no puedo recordar qué día es.
—Juguemos un juego, gatita. —Escuché la voz de Hanma.
Lo sentí quitarme la almohada de la cabeza, y pronto subió a la camilla.
—Será más sencillo hacer ésto, ni siquiera puedes saber lo que hago. —Rió y entonces sentí la almohada en mi cara.
Mi pulso en la máquina comenzó a acelerarse, por lo que una pequeña alarma de activó.
—Mierda, eres peor que una cucaracha. —Gruñó y entonces ya no sentí su peso sobre mi.
La puerta se abrió y voces femeninas corrieron hacia mi.
—¿Qué sucede? ¿Por qué la almohada está en el suelo?
—Su ritmo cardíaco aumentó, aún está elevado.
Ellas siguieron hablando, pero sólo atiné a llorar internamente. Me había salvado de morir.
—Ella... ¿Está llorando?
—No se supone que deba hacer eso.
Sentí un pañuelo en mi sien, limpiando la dichosa lágrima.
—Debemos llamar a sus familiares.
°°°
—Tras haber revisado las cámaras de seguridad, notamos que esta persona había tratado de asfixiarla. —Escuchaba la voz del doctor. —No pudimos saber de quién se trataba aún obteniendo las grabaciones.
—¿Ella se encuentra bien? —Preguntó Shinichiro.
—Si, afortunadamente no fue nada grave, nuestras enfermeras acudieron de inmediato y lograron rehabilitarla.
—Menos mal. —Murmuró el abuelo.
—Hicimos los exámenes correspondientes y no hay nada malo, todo en ella está correcto.
Pero entonces, sentí algo mojar mis labios, escurriendose por mi barbilla hasta mi cuello.
—¿Entonces está bien que le sangre la nariz?
—¿Eh? ¡Enfermeras! Por favor salgan de la habitación.
Las enfermeras me levantaron en la camilla y me colocaron unos tapones en la nariz, limpiandome.
También sentí un pañuelo tibio en mi frente, después de un rato el sangrado paró.
—Siempre nos das sustos de muerte, Chaeri. —Escuché a la enfermera.
—¿En verdad te preocupas por ella? Ni siquiera es parte de tu familia.
—Es solo que... Cuando la veo me da un sentimiento algo... familiar.
—¿Eh?
—Me recuerda a mi madre. —Murmuró.
—Ah, Jaeri, aún eres joven, casi cumples los dieciocho, aún tienes mucho que vivir.
Jaeri... Jaeri Katsura. Mi abuela.... ¿¡Mi abuela!? No puede ser, ¿O sí?
—Vamos, tenemos que atender al chico de nuevo ingreso. —Dijo la otra chica.
Escuché que ellas salieron de la habitación y entonces volví al silencio de siempre. Aunque bueno, solo las máquinas estaban sonando.
—Que pena que las malditas viejas no hayan revisado debajo de la camilla. —Rió Hanma.
—¡Así te quería agarrar puerco!
—¡Aaaahhh! ¡Pollito en fuga!
—¡Ándale perro!
Y después un desmadre en la habitación hasta que Shinichiro gritó desesperado.
—Me las vas a pagar pinche palo de escoba. Gizmo, estaba preocupado, y que bueno, porque ya supe quien era el Baboso ese. Nada más deja que lo sepa Mikey y aunque esté chaparro le va a saltar para darle en su madre. Pues óyeme, ¿Qué es eso de andar queriendo matar a la esposa de uno? Nononono, mal ahí.
Me reí internamente de todas las burradas que decía, incluso quería simplemente abrazarlo porque me había salvado de otro posible intento de asesinato.
Quise abrir los ojos, en verdad que traté de hacerlo, pero no lo logré. Ni siquiera podía sentir las otras partes de mi cuerpo, solo la mano izquierda.
—Bueno, me alegro de que al menos ahora estés consciente, llamaré al doctor. —Sentí un beso en mi frente y luego su ausencia en la habitación.
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