Eclipse

Capítulo 4

Merida

- No puedo creerlo.- grito.- ¿Y te gustó?

- Pues besa bien.- dice Elissa mientras se encoge en hombros restándole importancia a lo que paso la noche anterior.

- ¿Quería sexo?-pregunta Ethan mientras come su burrito.

- No, bueno, no sé, lo único que sabía era que yo no quería hacerlo, aún no me siento lista para eso.- come su manzana.

Nos encontramos en la cafetería hablando sobre las cosas que pasaron ayer, el chico se paso de copas y termino sin un zapato, despertó y tuvo que irse así a su casa.

La chica se beso con Elio y después la fue a dejar a su hogar, bueno, al menos él no era como su hermano.

- Ayer Merida estaba enojada por un idiota.- comenta el castaño.

- ¿Por quién?- frunce el ceño.

- El hermano de tu chico.- pongo los ojos en blanco.

- ¿El tatuado?

- Sí, ese.

- Vaya.- suspira. ¿Qué hizo?

- Pues tenía novia y aún así estaba coqueteándome.- como el plátano que tengo a medio terminar.

- Mierda, ¿por qué es tan difícil encontrar a alguien que te quiera bien en estos tiempos?

- No lo sé.- digo encogiéndome en hombros.- Pero dejemos de hablar de él y mejor concentrémonos en acabar para ir a la clase de historia.

- Sí.- contestan.

Terminamos de comer y juntos nos dirigimos al salón, tomamos asiento y esperamos a que el profesor llegue.

- Mi niña.- dice Dante sentándose frente a mí.- ¿Cómo estás?

- Bien.

- ¿Qué tal les fue ayer en la fiesta?

- Estuvo bien.- contesta Elissa.

- ¿Por qué no fuiste?- pregunto.

- ¿Por qué, me extrañaste amor?- sonríe con cariño.

- Obvio no.

- Tuve que cuidar a mi abuela, se enfermo.- su sonrisa se borra.

- ¿Ella está bien?- me preocupo.

- Sí, sólo fue un desmayo.- le resta importancia.

Iba a contestar, pero en ese momento entra el profesor, es robusto, con lentes, cabello corto y una sonrisa alegre.

- ¡Buenos días exploradores!

- Buenos días.- decimos todos.

- ¿Qué tal las vacaciones?- deja sus cosas en el escrito.- ¿Descubrieron cosas nuevas, Merida?

- Nada importante.- me rio.

- Mmm.- sonríe.- ¿Elissa?

- Nada.

- ¿Qué nadie se tomo el tiempo de leer historia?- ríe.

- Eran vacaciones, obvio no íbamos a hacer eso.- hablo.

- Tienes razón, es por eso que este año iniciaremos con todas las ganas.

El maestro nos dio su clase lo más animada que pudo. Él siempre era así, siempre trataba de hacer que las horas con él no fueran abrumadoras y cansadas como lo eran las demás, sino que contaba chistes que se relacionaban con la historia, contaba anécdotas que tenían alguna conexión con su materia y por eso nos llamaba explotadores.