Capítulo 12

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Merida 

Ya habían pasado cinco días desde que salimos huyendo de aquel parque, desde que me reí hasta que me dolió el estómago.

Estar con Luca se convirtió en uno de mis pasatiempos más perfectos que pude haber tenido en años, claro, sin descartar las veces que mi padre y yo reparábamos el auto en el garage.

Después de él, estaba Luca con sus sonrisas alegres, sus ojos cafés bellos, su cabello azul lacio, su manos largas y finas.

Cada vez que nos veíamos en la cafetería eran mis momentos favoritos, estar nosotros en una mesa hablando sobre todo, conversando sobre lo que nos gusta y lo que no.

- Siento que ya reprobé biología.- dice Ethan mientras llegamos a la escuela.

- ¿Por qué será? Ah, déjame adivinar, porque siempre te duermes.- le recuerdo.

- ¿Qué quieres que haga? Su clase es muy aburrida y me da sueño.- nos adentramos a la escuela.

- Al menos ten la intención de poner un poquito de atención.- dice Elissa.

- ¡Es difícil!- grita con frustración.

Mientras caminamos hacia nuestro salón, nos intercepta Luca con su sonrisa linda.

- ¡Ya te quitaron las muletas y el yeso!- grito al ver que ya no lleva nada en su tobillo.

- Sí, fue ayer en la tarde.

- Que bueno.- sonrío.- Ah, ellos son Elissa y Ethan.

Los presento, ya que en todo el tiempo que nos hemos hablado no los he presentado.

- El famoso Luca.- dice el chico a mi lado.

- ¿Famoso?- frunce el ceño.

- Sí, Merida no para de hablar de ti, dice que.- lo corto.

- Ah, no le hagas caso, esta mal de la cabeza y luego confunde las cosas.- siento como mi cara comienza a calentarse.

- ¿Entonces nos vas a negar que hablas todo el tiempo de Luca?- pregunta con burla mi amiga.

- Que halagador que hables de mí con tus amigos.- sonríe de lado.

- A veces.- ya no siento mi rostro de lo caliente que esta.

- No te preocupes, yo también hablo de ti.

Sí, definitivamente con eso acabo de morir.

- Mírala, parece un tomatito.- se ríe el castaño.

- Se ve linda.- le pone la cereza al pastel Luca.- Nos vemos luego, tomatito.- dice mientras se aleja.

- No puede ser.- me tapo la cara.

- ¿Por qué te pones roja Merida?- pregunta Elissa.- ¿Acaso te gusta el chico?

- Cállense.

- ¿Por qué, acaso se te acelera el corazón cada vez que hablamos de él?- habla Ethan.

- Son tan malos conmigo.- quito las manos de mi cara y los señalo.- Me hicieron quedar como idiota.

- Es tu verdadera personalidad.- fulmino con la mirada al chico.

- Corre.- dice ella.

- Ay mamá.

Con pasos rápidos se va, le doy unos segundos antes de salir corriendo hacía él.

🌌🌌🌌

- Nos vemos luego chicos.- nos despedimos mientras salimos de la escuela.

- Nos vemos después chicas, tengo que ir a una cita.- dice Ethan mientras sonríe.

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