Eclipse

Capítulo 23

Merida

Las semanas con Luca fueron las mejores, siempre estábamos juntos, incluso en la cafetería con mis amigos que también lo integraron muy rápido a nuestro pequeño grupo.

De vez en cuando venía a mi casa para comer, aunque por otro lado yo casi no iba a la suya, siempre me ponía excusas y yo ya no insistía más para no hacerlo sentir incómodo.

- Rápido Merida, Ethan te esta esperando.- dice mi madre mientras como un pan tostado un poco quemado.

- Estoy comiendo lo más rápido que puedo.- hablo con la boca llena.

- Si no te hubieras levantado tarde nada de esto estaría pasando.- se sienta frente a mí.

- Perdón, pero me quede despierta casi toda la noche porque tenía que terminar el trabajo de historia, sabes que esa materia es mi favorita.

- Sí.- sonríe.- Tu trabajo será el mejor.

- Eso espero.- me limpio la boca.- Me voy.

- Cuídate.- grita mientras tomo mi mochila y salgo de la casa.

- ¡Joder Merida, llegaremos demasiado tarde a la escuela!- grita Elissa mientras corro.

- Perdón, sé que es mi culpa, pero ayer me desvele por terminar el trabajo de historia. Arrancha.- digo una vez que me abrocho el cinturón.

- No me digan que había trabajo de historia.- contesta Ethan mientras vamos en carretera.

- Sí tarado, nos los dejo desde hace una semana.- contesta la chica con cansancio.- ¿Qué no te preocupa nada en la vida?

- Sí, pero historia no esta en mis prioridades.- se ríe.- Mer, debes de ayudarme con el trabajo.

Me observa por el retrovisor mientras me sonríe como un corderito.

- Bien, pero me deberas algo.- pongo los ojos en blanco.

- ¡Lo que usted quiera madame!- mi amiga y yo nos reímos ruidosamente.

Después de un rato, finalmente llegamos a la escuela.
Nos bajamos del auto y corremos como si fuera de vida o muerte llegar a las clases.

- Toca la puerta.- dice Ethan con sus ojos fijos en los míos.

- ¿Por qué yo?- susurro.

- Porque por tu culpa llegamos tarde.- habla en el mismo tono que yo.

- Pero me da miedo la profesora de literatura.- hago una mueca.

- A mí igual, pero.- se corta él mismo al ver que la puerta del salón se abre dejándonos ver a la maestra con los brazos cruzados.

- Señorita Lennox.- me mira.- Señorita Ross y el joven Russel.- aparta la vista el chico.- ¿Saben qué hora es?

- Temprano.- contesto.

- No es momento para sus chistes Lennox.- me fulmina con la mirada.

- Perdón.- bajo la vista avergonzada.

- ¿Por qué motivo llegaron tarde?

- Por culpa de ella.- me señala Ethan.

- ¿Por Lennox?- me mira mientras fulmino con la mirada al chico.

- Ayer me desvele terminando un trabajo profesora, como sabrá, la entrega de los proyectos se acerca y apenas ayer terminé el de usted, trabaje muy duro toda la noche.- la miro directo a los ojos.

- Ah, ¿el mío?- sonríe de lado.

- Así es, es por eso que llegamos tarde.

- Está bien, si es por trabajo pueden pasar.- se hace a un lado.- Tomen asiento, pero que sea la última vez.