Nuestro tiempo (Naegiri)

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Pov Makoto Naegi.

Al salir, lo primero que hice fue buscar a Kyouko, ella ya me esperaba afuera. Usaba un bikini negro, una sudadera abierta y tenía su cabello recogido, pude notar también que tenía unas gafas negras en su cabeza.

Sin duda se veía preciosa. Antes de siquiera poder decir algo, fui tomado de ambos brazos por las amigas de Kyouko. Todas demostraban una seriedad poco normal.

—Hey, Nae, ¿vas a...?

—Está con nosotras ahora —declaró Asahina, interrumpiendo a Hagakure.

No dije nada, simplemente me dejé arrastrar. Los chicos no me dijeron nada, simplemente me miraron por un segundo para luego ir al agua. Nosotros por nuestra parte fuimos debajo de una gran sombrilla de paja y nos sentamos debajo.

Las miré a cada una. Asahina usaba un bañador amarillo que se veía bastante apretado. Oogami vestía el mismo traje que Asahina, y también se veía bastante apretado, pero no de la misma forma. Fukawa tenía un traje de baño completo, de un color amarronado. Celes usaba un bikini negro con bordes rojos. Tan solo por el hecho de mirar, mi cara se tornó roja.

—Que extraño... —musitó Asahina.

Yo la miré, ella simplemente llevó su mano a mi pecho y mi estómago, no hace falta decir que mi sonrojo se intensificó.

—¿Q-Q-Qué haces?

—Creí que con nuestro entrenamiento sacarías abdominales, es raro.

La nadadora siguió inclinada hacia mí, tocándome el estómago confundida. Yo simplemente me esforzaba por no mirarla, sabía que Kyouko me estaba mirando, así que hice lo más lógico en mi opinión, llevé mi vista al cielo, para así no tener que ver a la morena.

—¿Pasa algo? —preguntó Asahina.

—N-No.

—¿No crees que deberías mirarla a la cara para hablarle? Es de mala educación no hacerlo cuando te hablan —habló Celes, pero pude notar el tono burlesco de su voz.

—¿Y-Y qué es lo que ocurre? —pregunté, cambiando de tema.

—Vamos a hacer un plan —respondió Kyouko, pero por su tono noté que estaba molesta.

—¿Un plan para qué?

—Kyouko nos ha dicho de la apuesta, así que pensábamos hacer un plan para poder ganarles —me explicó Asahina.

Traté de calmarme, pero no lo logré, ya que pude sentir como una mano era apoyada en mi hombro y sentí como mi brazo era rozado por... algo grande. Asahina, quien estaba pegada a mí, llevó la mano que no utilizaba a la arena y dibujo un círculo con su dedo.

—Mi hermano y yo jugábamos juegos de tiros antes, creo que puedo hacer una estrategia decente —habló la nadadora.

—Y yo soy experta en ganar cualquier apuesta, así que creo poder ayudar en la planificación.

Sentí como una mano diferente se sostenía de mi otro hombro, para luego sentir como Celes apretaba su pecho contra mi brazo. El sonrojo en mi cara se intensificó. Sé que Asahina lo hace por accidente, pero Celes lo hace a propósito, le gusta burlarse de mí y molestar a Kyouko.

—Diría que hiciéramos equipos de dos, el primer... ¿Estás bien, Naegi? —preguntó confundida la morena.

—¿P-P-Podrían alejarse un poco, por favor?

—¿Por qué?

—Makoto, aquí —se limitó a ordenar Kyouko.

Con la gracia de un tronco, intenté levantarme, pero al instante fui tirado del brazo y obligado a sentarme. Miré a Kyouko, la cual me dedicaba una mirada enojada, entrecerrando sus ojos y arrugando su nariz.