CÓDIGO AZUL © [+18]

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Repaso varias veces los párrafos del libro y doy un sorbo a mi jugo de manzana. Dejo el jugo a un lado y masajeo mi sien.

No he vuelto a mi casa, son las dos de la madrugada, sinceramente, tengo bastante miedo de fallar en esa cirugía con el doctor Jefferson; necesito mucho que salga todo a la perfección, es mi primera cirugía.

Paso mis manos por mi rostro y cierro los ojos para soltar un suspiro.

Al abrir mis ojos me sobresalto por tener el rostro del doctor Jefferson frente a mí.

—Carajo —murmuro.

—Esa boca, Danvers —toma asiento frente a mí y me observa—. ¿Se puede saber qué haces aquí en vez de estar descansando para la cirugía que es dentro de... —observa el reloj de su muñeca— seis horas? —clava sus ojos en los míos.

—Quería estudiar para no cometer ningún error en la cirugía —suspiro.

—No necesitas estudiar —frunzo el ceño—. En el momento que me dijiste el diagnóstico y el porqué de él, estuve seguro de que podrías hacerlo y serías capaz —cierra el libro del cual estaba leyendo—. Sino te viese capaz, no te habría elegido para participar de la cirugía —medio sonrío.

—¿Y si cometo algún error y deja a la paciente con alguna secuela? —cuestiono apresurada moviendo las manos.

—A ver —sujeta mis manos entre las suyas lo cual causa que me calme un poco—, si sigues con tus inseguridades deberé bajarte de la cirugía y sería una pena porque —hace una pausa—, te veo muy capacitada aunque tú creas que no —susurra.

—Bien.. —asiento lentamente.

—Ahora, mejor ve a descansar en uno de los cuartos de descanso, necesitas dormir un poco —observo nuestras manos y aún están entrelazadas.

—¿Dónde están? —arrugo mi ceño.

—Te acompaño —ambos nos levantamos.

Comienzo a caminar y siento como con sutileza coloca sus dedos en mi cintura y me guía por el hospital.

Ambos nos detenemos frente a una puerta cerrada. El doctor abre la puerta, veo una litera y también una cama a un lateral.

—Este es uno de los cuartos de descanso que hay en el hospital —habla y lo observo—. Aprovecha y duerme un poco, lo necesitarás —palmea mi hombro—. A las siete en punto te quiero en la habitación 245 para comenzar a preparar a la paciente —asiento—. Que descanse, Danvers —se despide con un movimiento de cabeza y se va.

Ingreso en el lugar, cierro la puerta detrás de mí y observo el lugar.

Me siento en la cama que se encontraba a un lado de la litera, me quito la parte de arriba del uniforme par quedar con la camiseta de tirantes blanca que llevaba por debajo. Me recuesto en la cama, coloco una alarma a las 6:30 y pocos minutos después el sueño se apodera de mí.

|| ... ||

Lavo mis dientes y luego mi rostro para poder quitarme lo adormilado de encima. Recojo mi cabello en un rodete algo desaliñado pero no importa.

Había vuelto al lugar de los lockers para poder colocarme un poco de desodorante. Me vuelvo a poner la parte de arriba del uniforme, veo la hora y son 6:48, así que decido buscar la habitación en la que debía estar.

Tardo alrededor de diez minutos y en cuanto la encuentro le doy una sonrisa a la paciente.

—Buenos días, señora... —leo el expediente— .. Núñez —me medio sonríe—. ¿Cómo pasó la noche? —me acerco a los monitores para luego anotar su saturación y niveles.