C1: La vida de dos adolescentes

31.1K 900 222
                                    


Sonó el despertador. Era el ultimo jueves de vacaciones, me levante de la cama dispuesta para cambiarme con un short comodo, una camisa y unas zapatillas deportivas, me dirigí al baño para hacerme una coleta alta, cuando me vi al espejo me asuste, tenia todo el rimer corrido y unas ojeras enormes, me despinte lo mas rápido que pude y baje las escaleras dirigiéndome a la cocina.

Me presento, soy Mariana Borrmann, tengo 17 años y estoy a punto de entrar al ultimo año de prepa. Soy de Arizona pero poco después de que nací nos mudamos a Beverly Hills por el trabajo el mis padres.

Mis padres John Borrmann y Samantha Nicols, son los famosos dueños de la compañia mas famosa en el cine y productores de las películas mas vistas en todo el mundo.

Si se lo preguntaban, no, no he salido en ninguna de ellas.

No soy esa típica rubia creída que tiene los padres mas ricos de la zona y que están por todas partes gastando el dinero de sus padres en ropa y zapatos de marca, de echo ni siquiera me gusta ir de compras, la ultima vez que fui con mi mejor amiga Hanna, termine dormida en una banca, y no fue bonito.

Tengo un hermano gemelo, Dave, mayor por 2 minutos, es la persona mas egocéntrica que se pueden imaginar, a diferencia de mi el si sale en algunas películas de mis padres y es muy famoso. Es así como el hijo de mamita, por todo saca la excusa de que su mama y su papa le vendrán a ayudar.
Una vez amenazo al profesor de historia, le dijo que si no le ponía una A+ en el examen lo demandarían por todo lo que tenia, y vaya que si le fue muy bien.

En cambio yo soy muy bajita y castaña, no quiero presumirles pero tengo buen cuerpo y me gusta mucho leer sobre ciencia ficción y fantasia.

-Buenos días Lupita- dije agarrando la tostada con mantequilla que había en la mesa.

-Buenos Días Nana- me dijo- ¿Como te fue con Finn ayer?- me pregunto con mirada provocadora.

-¡LUPITA!- y se puso a reír como si no hubiera un mañana -No es gracioso, ni si quiera paso nada.

-Bueno en la noche no sonaba como un "No paso nada"- me dijo todavía riéndose y yo también reí -¿Te llamaron ayer tus padres?-

Y fue cuando de un estado de animo feliz cambias bipolarmente a uno enojado.

-No- dije enojada, y mas porque se que tampoco lo harán hoy.

Lupita se acerco a mi -Vamos Nana, animo dales una oportunidad, tal vez tenían mucho trabajo y no tuvieron tiempo-

-Wow, desde cuando ir a fiestas y a estrenos de películas se le llama no tener tiempo para hablarle a su hija que esta sola en casa.-

-No estas sola panchosa, me tienes a mi y a Dave.

-Dave siempre se la pasa en fiestas y cada noche con una chava diferente así que no cuenta-

Lupita río a carcajadas y me dio un termo con agua -Ya vete a correr antes de que se llene el parque-

Salí de la casa no sin antes despedirme de Lupita.

Hoy se me antojaba hacer un recorrido diferente al de todas las mañanas para despejar mi mente un poco de como mi familia apesta, en verdad quiero regresarme con mi abuela y mi tia Helen a Arizona, aunque carecen mucho de dinero prefiero estar haya y tener atención a que aquí que nadie me pela.

Me pregunto con que chava habrá pasado la noche Dave, no me sorprendería terminar siendo tía en poco tiempo.

-¡Auch!- sentí un golpe y para cuando abri los ojos estaba tirada en el suelo y a lado de mi, una chica pelirroja muy bien vestida.

Instituto WhitmoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora