Sonreír mientras mueres por dentro.
Sí, es falso, tal vez hipócrita, e incluso inmaduro. Pero a mi no me lo parece.
Cuando aprenderá la gente? Hipócrita y eccendentista no es lo mismo; hipócrita es el que oculta su opinión por beneficio propio, eccendentista es aquel que oculta su miseria y dolor tras una sonrisa, con el fin de no dañar a nadie.
La gente me dice que debería pedir ayuda, que hay gente que me quiere. Pero, por que iba a hacerlo? Lo intente muchísimas veces, y, alguien me escucho? Gritos mudos a oídos sordos. No, prefiero no seguir haciendo daño, encerrar a los demonios en mi pequeño infierno personal y cerrar la puerta con una sonrisa, protegiendo a los del exterior.
A mi me parece una buena solución, hasta me parece honorable. Proteger a los demás mientras tu ardes por dentro, protegerlos de ti; por que todos somos una granada, lo que ocurre en que algunos explotamos y protegemos a los demás con los restos frágiles y rotos de nuestra alma, cortada a la par de nuestro cuerpo. Como guerreros altruistas y valientes.
Pero da igual, hipócrita o no yo sigo aquí. Con un infierno dentro de mi cabeza, cascos en los oídos, una sonrisa y marcas en mis muñecas.
Más que marcas, gritos ahogados, ignorados entre la multitud muerta de esta sociedad vacía.