Siento muchísimo no haber subido texto en estos días, pero realmente aceptemoslo, nunca había estado tan hundido.
Siento que el texto sea tan corto...
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Caminas entre la gente con la mirada gacha, auriculares en los oídos y mirada en el suelo, esquivas a la gente evitando el más mínimo roce, inseguro, temiendo el contacto humano.
Pasas por los pasillos, sin rumbo, sin un destino, tan solo intentas sobrevivir un recreo más, un días más. Te deslizas a traves de un grupo de gente que ríe, y ya por mera costumbre agachas aun más la cabeza, temiendo ser tú el objeto de burla, de nuevo. Aceleras el paso y continuas sin ningún destino hasta que tocala sirena.
Pero que pasa? Crees que la sirena, el ring tan esperado sera tu salvación? Que ingenuo, ambos sabemos que la pesadilla no ha echo nada más que comenzar.
Ya en la calle sigues evitando la gente, pecando de antropofóbico y prejuzgando al resto del mundo por tu sufrimiento, tu inseguridad. Tan solo quieres llegar a casa y encerrarte en tu cuerto, totalmente solo, como siempre has estado, sin juicios, sin inseguridades, solo tú y la cuchilla.
Pero no cariño, esa no es la solución.
No necesitas el eterno tick verde social que afirme que todo está bien, tu pareja, gustos, ropa, música... son decisiones propias, no de los demás, no puedes seguir caminando a la sombra de la acera, deseando desaparecer, comete locuras. Tropiezate y levantate como has echo siempre, hundete y sal a la superficie de nuevo, tiñete de azul, rapate, sal de fiesta... es tu vida, has de vivirla tu, no los demás, y nunca permitas que tus inseguridades te frenen, que sea otra persona la que elija tus decisiones, vive tu vida y ignora la de la sociedad.
Al final todo quieren ser diferentes, y creeme, tu les llevas ventaja.
