Amor Inesperado (KOOKMIN)

🥀 Twenty Nine 🥀

-Jeon sé que te pedí quedarte hoy por mi hermana, ¿pero tu no tienes cosas que hacer?–Pregunté mientras picaba la cebolla.

-Le dije a Hoseok y a Wang que me tomaría una semana de vacaciones–Jeon hecho las salchicha picadas al sartén y se me acercó. -Solo que la ropa se me fue en la camioneta cuando le dije a mi hija que se fuera con mi mamá...

-Eso es lo de menos, utiliza algo de mi padre por hoy y listo... Después no deberás utilizar ropa–Sonreí cuando él me dio un beso en el cuello.

-Y yo creyendo que iba a dañar tu mente... Tu vas a corromperme amor...

-Tonto Jeon–Rei negando y me giré para empujarlo levemente. -Mejor ayúdame a terminar el desayuno, quiero que este todo preparado para cuando ella llegue...

-Esta bien... ¿Sabes a que horas llega?–Preguntó retomando el fritar lo del sartén.

-No sé, y ni puedo saberlo por qué no puedo tener una conexión con ella.. Al igual que tu bloquean mis habilidades..

-¿Con cuantas personas más te pasan esto?–Preguntó curioso.

-Humanos... Solo tú y ella, y pues con los de la fraternidad solo puedo sentir su presencia, no puedo saber que piensan pero si sé que harán... Es algo que nos caracteriza por ser similares–Le expliqué y él asintió.

-¿Amor no crees que no tienes acceso a nuestras mentes por que tienes una conexión con nosotros?–Preguntó y me miró de reojo. -¿Que opinas?.

Me acerqué y lo abracé por la cintura pensando en lo que que decía.

-Puede ser... La verdad nunca me explicaron eso por que según ellos los Aigorianos no veniamos a querer a los humanos...

-Mmm... Eso solo significa una cosa...

Jeon le bajó fuego al sarten y safó mi agarré para girarse y verme.

-¿Que significa según tu?–Sonreí al ver cómo sus ojos brillaban.

-Qué me quieres, y entre más me quieras menos podrás meterte en mi cabeza–Jeon me abrazó pegandome a él y me besó castamente. -Eso me hace muy feliz...

-Escucho tu corazón latiendo con fuerza–Puse las manos en su pecho y sonreí. -Me gusta cuando pasa eso... Siempre que presumes estar feliz tu corazón reacciona así...

-Es por ti...

Le abracé el cuello y nos besamos como lo hacíamos cada vez que podíamos. Él absorbió mis labios lento pero con fuerza y mientras yo seguía su ritmo enrrede mis manos en su sedoso cebello.

-Amor el desayuno no se hará solo–Susurró al separnos del beso.

-Entonces hazlo... Te dejaré cosinar...

Le di un casto beso y me separé, él me quedó mirando pero yo solo tomé una manzana y me senté en el mesón a comerla.

-Dale Jeon... Cocina... Veré tus cualidades de chef...

Él se rio divertido y le subió el fuego al sarten para seguir cocinando. Yo sonreía mientras lo miraba cocinar pero dejé de hacerlo cuando el timbre de la casa sonó.

-Es ella... Llegó mi hermana...

Jeon apagó el fuego y empezó a dejar el contenido del sartén en un plato.

-¿Como lo sabes?–Preguntó.

-Por qué siento lo mismo que sentí el día que llegaste–Me bajé y boté la manzana que quedaba a la basura. -Nada...

Salí de la cosina rápidamente hacia la puerta, abrí la puerta sin esperar un segundo y la vi...

Una mujer alta de cabello rubio liso, lindas mejillas gorditas y rosaditas, labios con labial rojo y lucía un vestido blanco corto ajustado a su cuerpo, calzaba unas botas negras de tacon con toques brillantes.

-Chae...

-Rosé...

Quedé confundido y ella lo notó por que sonrió levemente.

-Así soy conocida por todos, Park Rosé.. Nadie me llama por ese nombre...

Asentí y sentí unas manos en mi cintura, volteé y era Jeon con una sonrisa.

-Buen día–Saludó él a mi hermana.

-Buen día señor–Ella hizo una reverencia.

-¿Quieres pasar?–Le pregunté y ella miró el lugar.

-Está casa... Vives en la casa donde mataste a la familia–Ella me miró tristemente. -Mamá... Papá... Y mi hermano... Todos ellos se fueron por tu mano...

Asentí y me acerqué a ella, los dos quedamos frente a frente.

-Mentiría si te digo que me arrepiento de lo que hice... Ellos se lo merecían, ninguno era buena persona y solo hacían daño además eran una amenaza para mi...

-¿Sufrieron?–Preguntó con lágrimas en los ojos. -Esperé veinte años para saber si ellos sufrieron ese día...

-Si lo hicieron...

Ella rompió en llanto y me abrazó con fuerza.

-Papá abusó de mi–Sollozó rota. -Igual que TaeYang y mamá no dijo nada, solo me culpaba diciendo que yo los buscaba...

La abracé fuerte y ella solo siguió llorando fuertemente, le acaricié el cabello y miré todo el jardín de mi alrededor... Debía irme de esta casa por mas que la fraternidad me dijera que debía quedarme.

-No sabía nada de eso...–La separé y le seque las mejillas. -Yo...

-Como lo sabrías si estabas en Europa–Ella sonrió y negó. -Ni siquiera te conocía en persona, sólo veía tu rostro por las fotos que enviabas... Siempre quise conocerte...

-Yo siempre estuve contigo, no me veías pero estuve contigo cuando empezaste a caminar, cuando dijiste papá, cuando creció tu primer diente y también cuando se cayó, el primer día de tu escuela... Chae siempre estuve ahí y más el día que te dejaron en la casa de esa mujer mayor...

Ella rio llorando y se alejó dando vueltas.

-Cada vez que le decía a alguien que mi hermano estaba conmigo me miraban como si fuera una loca–Me dijo riendo. -Sonara loco pero... ¿Tu me dabas un beso en el cabello todas las noches hasta que te metieron a la cárcel verdad?–En ningún momento su sonrisa se fue.

Asentí con una sonrisa y ella se asombro colocando sus manos sobre su boca.

-¿Amor no tienes que decirle algo a tu hermana?–Preguntó Jeon mirándome.

Lo miré unos segundos y verlo sonreir me hizo hacer lo mismo y asentí.

-Debo decirte la verdad de mi, Chae...

Ella asintió limpiando sus lágrimas, sonrió y me tomó la mano.

-Vamos a hablar por horas hermano, tengo muchas cosas que contarte y te escucharé lo prometo pero quiero decirte muchas cosas primero...–Me dijo muy animada.

-Entren, mientras hablan pondré la mesa...

Asentimos y entramos a la casa, Jeon puso la mano en mi trasero al cerrar la puerta y me dio un beso en la mejilla. Sonreí y lo empujé yendo hacia la sala con mi hermana, escuché su rísa y me sentí mucho más tranquilo que antes.