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La puerta de madera se abrió con un crujido, Thomas observo la habitación de Annabelle y miro alrededor, si hubiera entrado sin tocar ella le hubiera arrojado una almohada.

El hombre sonrio un poco y se sentó sobre el borde de la cama.

—¿Como se incendio? — comenzó a indagar, sabía que era un lugar muy resistente y ahora hecho cenizas.

—Un accidente— contestó.

—Las monjas tenían heridas de bala— alzó el periódico y leyó la noticia— Mueren monjas del convento por persona desconocida por culpa de un arma de fuego, el lugar se incendio sin explicación alguna... — terminó de leer y la miro— ¿Tienes algo que ver con esto?

Annabelle paso su mirada de Arthur y Thomas y viceversa, ambos hombres se miraban como sabiendo la verdad.

—En mi defensa, eran una monjas malditas, discutí con ellas porque iban a matar a mi gato...

El gato soltó un maullido a su lado y pasa su mano sobre su pelaje, sonrie un poco recordándola. Hermana o no se ganó su aprecio y respeto, el gato ronronea ante el tacto y observa por la ventana el cielo nocturno mientras se pregunta.

¿Donde estarás en estos momentos?

¿Ya habrás comido?

¿Tendrás frío?

¿Tienes el arma cargada?

—¿Melancólico?— pregunta una voz detrás del hombre.

Thomas se giro mirando a Grace quien se despeja del marco de la puerta, observa la habitación y toma asiento al lado de su esposo.

—¿Donde estará?— pregunto Thomas mirando hacia la ventana—¿Hice lo correcto?— mira a la rubia a su lado.

Grace aprieta su mano y lo mira.

—Temo decirte que no lo hiciste, si es tu hermana o no debió quedarse aquí  bajo nuestra protección. Ahora afuera no podemos protegerla.

Thomas recuesta su cabeza sobre el hombro de Grace y ella pasa un brazo sobre los hombros de Thomas.

—Solo quiero que regrese a casa Grace, que arreglar mi error.

—La buscaremos todos mañana, no le pasara nada— hablo Grace intentando convencerlo mientras ella se encontraba aun más preocupada.

***

La lluvia empapaba el cabello rubio de Annabelle y se le pegaba al rostro mientras gruesas lágrimas caían de su rostro.

Nadie la buscaría.

—Tia Polly— sollozo y la imagen de su difunta tia apareció en su mente— ¿Que hice mal?— pregunto a la nada y luego alzó sus ojos al cielo— ¿Que hago ahora?

Recargo su cabeza en la pared y el dolor de cabeza se intensificó, movió sus manos encademandas y toco su cabeza, quito las vendas sucias y las arrojó al piso, su cabeza comenzó a palpitar y coloco sus manos en la sien.

Su cabello lleno de sangre comenzaba a lavarse gracias a la lluvia, el agua teñida de color rosa se filtraba por la alcantarilla.

La puerta de metal crujio y bajo sus ojos verdes hacia la entrada, ahí estaba recargado William con un cigarro en la mano y una sonrisa en su rostro.

—¿Frío shelby?

Hablar le cansaba así que solo lo observo.

—Mañana todo terminará, lo prometo— se acerco a ella— Yo jamas prometo en vano. Dulces sueños, Shelby.

Annabelle lo observo salir y nuevamente recostó su cabeza en la pared.

***

Las aspas del ventilador daban vueltas en el techo, Whitey dejó sobre la mesa la quinta botella de cerveza y recostó su cabeza en la mesa.

—Winn—hablo una voz y el rubio alzó sus ojos.

Thomas Shelby se acercaba a él junto con toda la familia, Whitey se levantó de su silla y lo observo.

—¿Has visto a Annabelle?— le pregunto— Ya la he buscado por todo Birminham y no la encuentro.

—La corriste— le recuerdo lo que pasó en el pop— Le dijiste que no era quien dice ser y ordenaste que se fuera y ahora quieres encontrarla.

—Se lo que le dije— le alza la voz Thomas con molestia— No estoy aquí para que me critiques, te recuerdo que tu engañaste a mi hermana por no decirle quien eras.

Whitey alzó una ceja.

—Con todo respeto Thomas, eso es lo menos importante en todo esto.

—Como sea— negó el hombre y miro a su familia— Buscaremos a Annabelle en la ciudad, no debe estar lejos.

—Yo le pediré ayuda a los Billy Boys—hablo Finn dándose la vuelta para abandonar el pop.

—¿Desde cuando somos amigos de los Billy Boys?— pregunto Arthur hacia su hermano.

Finn tomó el arma de la mesa y la cargo, pasó de nuevo al lado de su hermano y hablo sin verlo.

—Desde que llego una persona más peligrosa a Birminham — se giro hacia su hermano— Y temo decir que no son los Billy Boys.

Thomas se giro hacia sus hermanos y comenzó a dar órdenes a todos de donde buscar, ordeno que las mujeres se quedarán en casa por si ella regresaba y abandonaron la casa shelby en busca de Annabelle.


PEAKY BLINDERS | FEELING GOODDonde viven las historias. Descúbrelo ahora