PEAKY BLINDERS | FEELING GOOD

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—Alto— ordeno Whitey antes de doblar la esquina, la fuerte lluvia caía sobre y Annabelle se giro a verlo, Whitey miró de reojo las calles desérticas y escucho a lo lejos pasos acercándose— Nos siguen— afirmó mirando a William y Annabelle.

La joven Shelby sacó el arma y los tres apuntaron a la calle esperando la llegada de algún enemigo. William observo entre la oscuridad y sonrió al ver a sus compañeros, miro de reojo a Shelby y a William y asintió con la cabeza de forma discreta hacia los hombres de su padre.

Los disparos comenzaron de todas partes Annabelle se tiro al piso mojado y desde ese ángulo comenzó a disparar, detrás de Shelby, Whitey hacia lo mismo haciendo todo lo posible por proteger a la chica.

—Debemos salir de aqui— ordeno William siguiendo su plan y corrió por la calle, Annabelle y Whitey intercambiaron una mirada y lo siguieron sin pensar.

Los hombres comenzaron a darse órdenes que los siguieran y los pasos apresurados resonaban en los charcos de agua.

—¿Donde se habrá metido?— pregunto Annabelle mirando a su alrededor, la lluvia se había intensificado y su cabello rubio se pegaba a su rostro.

Whitey observo de reojo y entre la oscuridad salió William.

—¿Que están esperando?— les grito— Andando.

Aquella pregunta que había lanzado William no había sido sólo a Annabelle y Whitey sino a los hombres de su padre, uno de sus hombres asintió con la cabeza entre la oscuridad y se alejaron corriendo hacia un lugar específico.

El hogar de Ada Shelby.

Los ojos del hombre se colocaron en la puerta de la casa, desefundo su arma y disparo abriendo la puerta, corrió escaleras arriba con el arma en alto y se detuvo al mirar a la mujer Shelby frente a él con un arma.

—Sal de mi casa— ordeno Ada hacia el extraño.

Una segunda persona entró al hogar de Ada y subió con lentitud hacia la segunda planta, coloco su dedo en su boca al ver a Ada indicándole que no hablara.

Ada parpadeo dos veces seguidas entendiendo el plan y el extraño se alejo de ambos hacia el cuarto del pequeño bebé, el niño fue cargado por el extraño y luego regreso con Ada quien seguía con el arma en alto apuntándole.

—Otro Shelby caído— sonrió el hombre—Salúdame a tu tía Polly.

Antes de que el hombre disparará se escucho un clic en su espalda y se dio media vuelta con lentitud, sus ojos se ampliaron al ver a la persona detrás de él y antes de emitir alguna palabra le disparo en la frente.

—La próxima vez que tardes de esa manera, yo misma te matare—exclamó Ada tomando entre sus brazos a su hijo quien comenzó a llorar— Es hora de que te vayas, ella no debe sospechar

El joven asintió con la cabeza y abandono la casa reencontrandose con el otro chico y Annabelle.