Capitulo 11

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Hinata iba caminando hacia su salón a paso algo lento, era su primer día así que la emoción le había ganado y había salido del departamento algo temprano, por lo que podía irse tranquilamente, tenía tiempo. No había dicho ni una palabra en todo el camino que llevaba y eso no hubiera sido un problema si hubiese ido sola, pero ese no era el caso, Naruto iba caminando a su lado, aparentemente la mayoría de veces llegaba tarde a sus clases y este año no quería que le pasara lo mismo, así que cuando Hinata había dicho que iba a irse temprano a su clase, el rubio se había ofrecido a acompañarla una parte del camino

La chica era alguien bastante tímida y le costaba mucho hablar con gente que no conocía o que conocía muy poco, como lo era Naruto. El silencio se le hacía algo incomodo, por lo que había comenzado a jugar con sus dedos, una mala manía que tenía desde que era una niña y que tendía a hacer cuando se sentía nerviosa o incomoda

-Oye, Hinata- dijo Naruto rompiendo el silencio y sobresaltando a la joven

-¿s-si?

-Creo que no te lo he preguntado hasta ahora... ¿a qué salón vas?- la seriedad con la que el rubio preguntó hizo que Hinata soltara una pequeña risa, de la que se arrepintió casi al instante, quizás eso molestaría al chico- ¿Qué es tan chistoso? –le preguntó y algo en su tono relajado la hizo sentir que podía decírselo

-E-es que, lle-llevas bastante acompañándome y no s-sabías a donde estaba yendo- contestó suavemente y sin mirar a su acompañante a la cara. Por un momento volvió a reinar el silencio y Hinata cerró los ojos con temor, más la risa estruendosa del chico hizo que se girara a mirarlo

-Fue algo un poco tonto de mi parte ¿no?- comentó rascándose la mejilla y sonriendo abiertamente

-U-un poco- respondió ella también sonriendo pero levemente- voy al salón 408

-Genial, me queda de camino. Voy al 312, de verás- dijo él y a los pocos segundos cuestionó- ¿Cómo estás? Es tu primer día como universitaria ¿Cómo te sientes?

-¿Te soy sincera?- él asintió enérgicamente y ella admitió- aterrada

-¿En serio? ¿Por qué?

-Yo no... no soy buena para hablar con la gente, me da pánico y-y empiezo a tartamudear y confundir las palabras, me enredo yo sola y nunca sé que decir

-¿Por qué te da pánico hablar con otros?

-Porque casi siempre, cuando hablo con alguien que no me conoce, me pongo muy nerviosa, quiero causar una buena impresión pero termino haciendo lo contrario, los nervios me ganan y la gente se lleva una terrible impresión de mi

-Yo no tengo una terrible impresión de ti

-¿en serio? N-no tienes que decirlo para hacerme sentir mejor

-Es en serio, solo te conozco de hace unos días pero ya tengo una impresión de cómo eres

-Y... ¿Qué impresión es esa?- preguntó ella, se dió cuenta de que ya casi llegaban al salón de Naruto, el salón 312 quedaba en el tercer piso de la universidad y ya iban a la mitad de las escaleras hacia el segundo pero en verdad quería saber que impresión tenía el rubio de ella

-Pues, me parece que eres.... –se puso un dedo en la mejilla y cerró los ojos un momento, como buscando las palabras- nerviosa, tímida, súper miedosa. Básicamente eres un bicho raro para el mundo

Los ojos de Hinata se abrieron con sorpresa ¿en serio pensaba eso de ella? Llevaban menos de tres días de conocerse. No había caso, si esa era una buena impresión de ella, no quería ni saber cómo eran las malas

-Pero ¿te digo algo?... de hecho me gusta la gente como tu- él le sonrío, ella lo miró confundida y quizás un poco molesta, algo que el rubio notó- ¿ocurre algo?

-Me llamaste un bicho raro y luego dijiste que te gusta la gente como yo, estoy tratando de asimilar eso

-¿Estás enojada?

-¿Te digo la verdad? Un poco. Si, soy timida y quizás un poco... no, de hecho si soy bastante miedosa pero no soy un bicho raro y no me gusta que me llamaras así

-Oye, calma, dije que eras un bicho raro para el mundo....

-¡Eso es peor!- recriminó ella

-Dejame terminar... eres un bicho raro para el mundo porque si algo no es como todos creen o como es la mayoría, ya es un bicho raro, no eres como el resto, eso es bueno, pero si te molesto lo que dije lo siento, no sabía como decirlo de otra manera sin que sonara peor, de verás- explicó él y algo en su tono de voz convenció a Hinata de que decía la verdad

-Bien, te perdono por llamarme bicho raro, pero aún así, no me gustó que lo hicieras. No lo vuelvas a hacer

-De acuerdo - él le sonrío y ambos se dieron cuenta de que ya estaban junto al salón del rubio- bueno, parece que ya llegue a mi destino

-Si... y parece que llegaste temprano... nos vemos luego- se dispuso a irse pero Naruto la detuvo

-Espera- ella se giró a mirarlo y él continuo hablando- antes me habías dicho que cuando hablabas con alguien no sabias que decir, pero conmigo si lo supiste, casi no tartamudeaste y hasta te enojaste conmigo.... Por cierto, quiero replantear mi opinión de ti: eres nerviosa, tímida, súper miedosa, honesta, muy honesta, en especial cuando algo te molesta, puedes ser un poco sarcástica cuando quieres, eres bastante amable. Básicamente, eres diferente a los demás. Me gusta la gente como tú... y no lo digo para hacerte sentir bien, de verás

-Gracias- ella sonrío- ¿en serio fui sarcástica?

-¿Cómo fue que dijiste?... ah si ''me llamaste un bicho raro y luego dijiste que te gusta la gente como yo, estoy tratando de asimilar eso''- dijo él imitándola- si eso no fue sarcasmo, no sé que fue- ella rió levemente y Naruto volvió a hablar- Lo harás bien, Hinata, no tienes que temer. Apenas te conozco pero se ve que eres una gran chica, los demás se darán cuenta de eso, solo tienes que darles tiempo

-Gracias, Naruto. Ten un buen día, nos vemos luego

-Nos vemos- se despidió él pero luego de que hubiera avanzado, la llamó- ¡Hinata!

-¿Si?- contestó ella desde las escaleras, a unos cuatro metros de donde Naruto estaba

-Buena suerte- le dijo, sonrió y finalmente entró en el salón

Naruto no pudo verlo, pero Hinata también sonrió, él había tenido razón, casi no había tartamudeado y no había sentido tanto pánico como había creido, incluso pudo tener toda una conversación con él, eso era un gran avance, al menos para Hinata. Si pudo hablar con Naruto, podía hablar con otras personas

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