-¡¿Las besaste?!-gritó Thomas con entusiasmo.
Los recuerdos de la noche anterior llegaron a mi mente.
. . . . . . . . .
"Era ahora o nunca.
Caminé hacia ella decidida. Hilaria miró a Victoria nerviosa. Todo pasó en cuestión de segundos, cuando quise darme cuenta; ya me encontraba a la altura de Hilaria, mis manos ya estaban en su cuello empujándola hacia a mi con fuerza.
-¿Qu...
Uní nuestros labios en un beso delicado y suave. Tardó en aclarar su mente, pero en cuanto lo hizo, sus manos ya me tenían sujeta por la cintura.
Algo comenzó a crecer en mi interior.
Sus labios se movían con habilidad entre los míos. Busqué el cuerpo de Victoria con mi mano libre, en cuanto encontré la suya, tiré de ella, logrando que se colocara detrás de mí.
Dejé de besar a Hilaria, encontrándome con sus ojos suplicantes por más, pero debía de hacer otra cosa en esos momentos. Giré la cabeza para dar con Victoria, quien me miraba confusa con la cabeza ladeada. Cogí esa oportunidad e incrusté mis labios con los suyos."
. . . . . . . . .
Pero al igual que llegaron esos bonitos recuerdos, llegaron unos que lograron colarse como agujas en mi corazón.
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"-Lo siento.-me desprendí de ambas en cuanto me dí cuenta de lo que estaba haciendo.-Me he visto incitada a hacerlo.-di un paso hacia atrás.
"¿Incitada? Eso será". No es que necesitara una sesión de besos después de lo que había pasado con Arcadia.
-¿Qué ha pasado con De Luca?-preguntó Victoria."
. . . . . . . . .
-Shh, quieres bajar la voz.-miré la puerta de la habitación nerviosa.
-Es que simplemente no puedo. Vosotras tres...-corrí hacía el interponiendo mi mano en su boca.
-Baja la voz. Pueden oírte.-susurré.-Tienes unos labios muy suaves.-me extrañé al tocar su textura con mis dedos.
-Gracias, cuando me hice vampiro cambi...-me miró con los ojos como platos.-No me cambies de tema.-me señaló con un dedo.-Vosotras tres...-realizó unas señas raras con sus manos.-¿Hubo lengua?
-¿Qué más te da?-me senté en el sofá.
-Vamos Maia, soy un vampiro reclutado por vampiros insensibles que si les preguntas algo por su vida, te matan al segundo.-se sentó a mi lado mientras ponía cara de cachorro perdido.-Vivo aburrido.-sonó impaciente.-Además, soy tu mejor amigo.
-¿Mi mejor amigo?-inconscientemente mi mente viajó hasta sus ojos azules y su melena rubia...hasta su sangre derramada por mi culpa.
-Lo siento, no debía... .
-No, está bien. No me dí cuenta del momento en el que te volviste mi mejor amigo.-me mordí los carrillos.
-Eso me duele.-intentó sonar afectado.
-Me alegra haberte encontrado ese día, Thomas.
-¿Encontrado? Yo te encontré.-me guiñó un ojo.-¿Estás bien?-acarició mis manos con sus pulgares.
-Estoy, que no es poco.
-Oye.-intentó sonreír.-No me cambies de tema.
-No sé de qué me hablas.-miré para otro lado.
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Hematófaga
Про вампиров¿Apocalipsis vampírico? ¿Qué clase de tontearía era esa? ¿Desde cuando existían los vampiros? Y sobre todo, ¿por qué soy su principal objetivo?