Mi nueva vida

//Capitulo 39/Una confesión//

Narra Ismael.

Hemos estado estudiando durante un prolongado tiempo, la verdad me sorprende lo bien que pueden estudiar ellas, incluso me sorprendí de ver a Yotsuba estudiando de más, es realmente sorprendente lo que ellas se esfuerzan por mejorar . . . Aunque no es bueno cuando les di directamente la orden de descansar.

Ese mismo día de descanso, Yotsuba me desobedeció, siguió estudiando mientras estaba en la noria o como mierda se llame ese cilindro giratorio, me enojo un poco, pero entendí sus motivos, no quiere hacer retroceder a sus hermanas, aparte, sentí que emanaba mas amor que antes . . . Si solo supiera que su verdadero amor es mi hermano y no yo . . . ¿Cómo será su reacción al vernos? . . . ¿Cómo será la reacción de todas al ver mis fotos antiguas?

- ¿Qué pasó Ismael? - Pregunto Fuutaro a mi lado mientras que alzaba una ceja.

- No es nada Fuutaro, solo pensaba en cosas insignificantes . . . Cosas inutiles - Dije con un tono calmado viendo el rostro de mi gran amigo - ¿Seguro que no quieres saber las calificaciones de las chicas? - Pregunte ofreciéndole un papel perfectamente doblado por la mitad.

- No, prefiero llevarme la sorpresa de sus resultados - Dijo mientras miraba la calle por ambos lados antes de cruzar.

- Ya veo - Dije mientras seguía su andar, ahora nos dirigimos al local de comida donde trabaja el, decidimos juntarnos con las chicas en ese lugar - La verdad es que yo tambien quiero que sea una sorpresa, por eso esta doblada la hoja - Dije mientras miraba levemente la hoja.

- Vaya, no me esperaba eso de tu parte - Dijo Fuutaro viéndome un poco sorprendido - Bueno, ya llegamos, partamos reservando una mesa, evitemos quedar como tontos parados en la entrada - Dijo mientras apuntaba una mesa que estaba en el fondo.

- Me parece . . . Aunque ¿No tenias que trabajar? - Pregunte recordando el horario laboral de Fuutaro.

- . . . Mierda - Susurro viendo como el gerente lo miraba saludando de manera algo . . . extraña.

- Tranquilo, ve a trabajar, yo veré todo lo que es el tema de las quintillizas - Dije de manera calmada mientras le levantaba el dedo pulgar.

- Gracias, aunque igualmente podre saber como les fue, no es difícil escucharles hablar cuando estoy trabajando de mesero - Dijo con un tono calmado.

- Como tu quieras, la verdad no es mi problema - Le dije en un tono algo burlesco, aunque parece que se lo tomo un poco a pecho - Tranquilo, es una bromita, mejor dime ¿A que hora llegan ellas? - Pregunte mientras miraba la cara neutra de Fuutaro.

- A la hora del cierre - Dijo con una cara tan calmada que me dieron ganas de romperle la mandíbula.

- ¿Y me trajiste a las 12 del medio día? - Pregunte mientras le daba una mirada de muerte.

- Pe-perdón - Dijo nervioso mientras temblaba levemente.

- Ya, ni modo, no tengo nada más que hacer - Dije suspirando algo cansado - Espero no le moleste a tu gerente que use una mesa durante todo el día - Dije mientras lo miraba aun un poco molesto.

- No te preocupes, igual hoy no viene mucha gente - Dijo mientras aparecía a nuestro lado - incluso creo que para la hora de llegada de ellas, habré mandado a todo el personal a sus hogares - Dijo mientras levantaba el dedo pulgar tratando de dar una cara genial.