Excusa.

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Nada pintaba bien para ninguno de los dos. La incomodidad que ambos sentían y el temor en Hoseok estaba más vivo que antes.

Lia sabía que había sido un error salir del castillo, algo había pasado durante su falta en el lugar pero por más que pedía una explicación a Hoseok el no respondía con la verdad, ponía alguna excusa lo sabía porque rasguñaba sus manos cuando hablaba.

El rey por su parte estaba muy inquieto que de costumbre y eso se debía a una sola cosa.

Para tapar la estupidez que había hecho con Hoseok noches anteriores hizo una peor.

Esa misma noche visito a su amada esposa, con desespero y algo de deseo en ambos tuvieron su primera noche como marido y mujer, causando revuelo en todo el castillo y Hoseok quedando como la burla ante los demás.

Las palabras eran el método de todos para burlarse de Hoseok.

"Ni siquiera su cuerpo es útil para nuestro rey."

"Seguro no sabe complacerlo en la cama."

"Solo es alguien que quiere vivir del rey, no hace nada por este reino, es un inútil."

"Alguien como él no tenía que ser rey."

Palabras llenas de razón y veneno que Hoseok oia cada momento desde hace una semana de lo sucedido.

Lia sabía que esas palabras eran mentira, la persona que el conocía era alguien lleno de bondad y amabilidad, era un ser sonriente y muy animado, reía por todo y tenía personalidad algo infantil, pero incluso personas así de especiales se desgastan, pierden brillo y esa especialidad que tienen se acaba.

-Me alegra que al menos este comiendo mejor, debe estar hambriento después de no comer por días.

-Si, últimamente tengo mucha hambre... Gracias por cuidarme Lia.

-No, es mi deber además que lo hago porque quiero hacerlo, recuerde que somos amigos... Olvide agradecerle por darme permiso ese día, gracias a usted pude ver a mi familia y pasar el día con ellos.

-Es lo menos que puedo hacer, eres mi amiga.- ambos sonrieron.

-¿No me dirá?- Hoseok la miro con curiosidad. -¿Que pasó ese día? ¿Por qué se veía peor?

-Ya te lo dije, tuve una discusión con él, solo empeore las cosas pero solo eso.

-Eso no es cierto, solo me dice eso, una pelea no causa que se vea más demacrado su rostro, algo le hizo él... Por favor confíe en mí, seguro podré ayudarle en algo.- el chico bajo su mirada y comenzó a llorar.

Quería contarle todo, quería desahogarse con alguien, pero tenía miedo de ser juzgado también por Lia, no quería que supiera de su error tan grande y terminara dándole la espalda a él.

-Yo...- calmo su respiración y hablo -. El y yo teníamos una discusión, ni siquiera se que pasó, no tenía fuerza y me deje llevar, fue una tontería... Me dolió mucho Lia, le dije que se detuviera pero no me hizo caso, no me dijo nada después de lo que pasó y yo tampoco quiero hacerlo, no quiero verlo.- la chica lo miro y corrió a abrazarlo, no quería que su amigo recordara todo eso.

-Perdon, de verdad perdóneme.

-¿Por qué te disculpas? No hiciste nada mal.

-Si lo hice, lo deje solo y esto paso, le dije que me dijera la verdad y recordó todo eso, si tan solo no me hubiera emocionado ver a mi familia usted estaría bien.

-Esta bien, no fue tu culpa, querías ver a tu familia y eso es normal, jamás será tu culpa y eso debes de entenderlo.- Lia se alejo de él y tomo sus manos, quería que se calmara y tuviera una conversación mejor.

-¿A visto a un médico? Sabe que usted podría...- sus palabras fueron interrumpidas.

-No, solo han pasado días de eso, además, gracias a JungKook yo no podré tener bebés.

-Eso no es cierto, los médicos dijeron que la probabilidad era más baja pero jamás era descartada, tiene que ver a un médico.

-No lo haré, no veré a nadie, estoy bien de salud y no quiero estar embarazado de alguien como él, no merece a alguien que lo llame padre.

-De acuerdo, pero si se siente mal no dudes en decirme, por favor.- Hoseok asintio y abrazo a Lia.

•••••

Era una emergencia de la cual nadie se tenía que enterar, nadie podía saber lo que sucedía en aquella parte del castillo.

Lia estaba preocupada y tenía una buena razón de hacerlo.

Hoseok había vomitado todo lo que comía durante dos semanas, al principio pensó que era normal debido al asco que sentía con su propio cuerpo, él mismo le había dicho el asco que sentía hacía el mismo, pero las veces fueron cada vez más fuertes y constantes que asustaba a ambos.

No tenía nada su estómago y no sabía que hacer, así que llamo a un médico real, uno en el cual pudiera confiar y que mantuviera el secreto que podía esconder esa habitación.

Sus manos temblaban y su vista estaba fija en el hombre que revisaba a Hoseok con detenimiento.

-Mi señor, es un honor anunciarle que está en cinta de nuestro próximo rey.- ambos palidecieron y comenzaron a llorar.

-Esta más que claro que le dije que lo que encontrará en esta habitación quedaría solo entre nosotros, le pagaré si es necesario.- hablo Lia.

-No es necesario hacerlo, guardaré el secreto si es lo que mi señor quiere solo quiero que me permita vigilar su salud, sería un honor servirle a usted.- dijo inclinándose a Hoseok.

El menor lo veía con algo de curiosidad, no pensaba que alguien que trabajaba para JungKook pudiera jurarle lealtad a él.

-¿Es lo que quiere? ¿Por qué?- pregunto Hoseok.

-Se lo que pasaría si usted queda en cinta y no su segunda esposa, nada bueno saldría de esto, el castillo correría peligro. El rey JungKook espera un heredero de su segunda esposa y todos estamos conscientes de eso, es por eso que quiero vigilar su salud y la de su bebé, ayudaré a guardar el secreto si es necesario.

-Aun no responde mi pregunta, ¿Por qué? ¿Que gana?

-Usted no merece todo lo que está viviendo aquí, es un infierno para cualquiera y usted a sobrevivido a esto, déjeme ayudarlo.

-Bien, pero si él se llega a enterar diremos que yo lo amenace.- el hombre levantó la vista viendo la ligera pero sincera sonrisa de Hoseok. -Si él se entera que usted sabía todo no vivirá, así que diremos que yo lo obligue a guardar el secreto, estaba amenazado de muerte por mi y es por eso que guardo el secreto.

El hombre asintio y miro a la mujer que estaba de pie frente a él.

-Tal vez mi señor sea muy piadoso pero yo no lo soy, personas como usted que juran lealtad hacia otras no son más que una mentira, si llega a hablar me aseguraré de que esa mentira sobre la amenaza sea verdad.- el hombre quizo hablar pero solo se inclino ante Hoseok y se fue.

-¿Que haces Lia? ¿Por qué dices eso?

-Es claro que no puedo hacer lo que dije mi señor, es una pequeña mentira para que el médico no nos traicione, no podemos permitirnos eso.- Lia lo abrazo y le sonrió.

Después de todo ella era la única que podía protegerlo en esa situación.

-J⁷

Silence.[JungHope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora