Conflicto.

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El ambiente se sentía extraño y todos lo sabían, parecía que nadie había podido dormir las últimas semanas y todo se debía a una sola persona.

Jackson Wang.

Al parecer había enviado cartas con amenazas de una posible guerra, era por eso que fue tan urgente el llamado de todos los reyes.

El salón estaba hundido en un gran silencio, nadie parecia querer hablar y algunos prefirieron salir del lugar antes que estar en la desesperación y miradas de todos.

Hoseok por el contrario, a pesar de que tenía prohibido tener emociones fuerte, había insistido en estar ahí y enterarse de todo, quería ser de ayuda para el reino y eso alegro un poco a JungKook.

A su lado estaba Jin, quien seguía insistente quedándose a su lado y no parecía moverse, creía que era el arrepentimiento por haberlo tratado mal en el pasado pero jamás pensó que era porque tenía un mal presentimiento en todo eso.

No era mentira para nadie que tarde o temprano se iniciaría una guerra, y Jin solo estaba preparado para lo que fuera.

—¿Seguro no desea irse de aquí?— susurro Jin.

—No, quiero saber que pasa, no puedo solo irme a descansar.

—Pero su viaje fue demasiado agitado y largo, supe que no durmió nada en el viaje.

—No estoy bien, quiero estar aquí y ser de ayuda para el reino.

El mayor asintio y sonrió, sin duda Hoseok era una gran persona.

—¿Están todos seguros que no actuará? Es un chico imbécil, lo provocamos y ahora quiere iniciar una guerra.— hablo uno de los hombres de enfrente.

—Nadie lo provocó, hablamos como siempre lo hicimos, pareció no gustarle que todos estuviéramos de acuerdo y por eso quiere iniciarla.

—Si quisiera iniciar una guerra ya lo habría hecho, ya pasó más de un mes y no a sucedido nada.

La sala poco a poco comenzaba a su ir de tono, los gritos y reclamos se hacían presentes y eso a Hoseok le hacía doler un poco la cabeza.

—Escuchen, todos estamos cansados y lo que menos necesitamos ahora es una pelea entre nosotros... Esas cartas no deben significar nada, fueron enviadas hace mucho, será mejor que mañana hablemos mejor, por ahora la seguridad de aquí es buena.

Todos asintieron y poco a poco se fueron, Jin jalo un poco a Hoseok para hacerlo salir de la sala.

—Ya escucho, debe descansar, no se preocupe, se que quiere ayudar al reino pero por ahora ni usted ni yo podemos hacer algo, lo mejor será dejar que JungKook hablé.

—Lo entiendo.

—No se sienta mal, será de ayuda en otras cosas.— lo miro y le sonrió amablemente, no quiera hacer sentir mal a Hoseok después de sus buenas intenciones.

•••••

Y así una semana había pasado, llena de discusiones y peleas que parecían no querer terminar, una guerra se aproximaba y ellos no arreglaban nada.

Bueno, al menos había llegado a una conclusión y eso era que gracias al golpe que JungKook le había dado a Jackson era que estaba aún más enojado.

Eso hizo que Jeon estuviera muy molesto y Hoseok se sintió asustado por eso, pero se sorprendió cuando el rey en vez de pegarle lo ignoro y hasta que se sintiera más tranquilo volvieron a hablar, sin duda era un gran avance.

Las malas noticias no esperarían mucho tiempo, o eso todos pensaban hasta esa mañana dónde todo se había derrumbado para todos en ese reino.

Una carta donde se avisaba que reinos enteros estaban siendo atacados mientras los reyes estaban en un reino diferente.

¿Que propósito tenía? El daño tenía que ser para los reyes... Pero que mejor manera de hacerlo que dañar al pueblo.

JungKook estaba totalmente preocupado y al igual que todos los demás partieron a su reino, pero está aves fue diferente, dejo a Hoseok en ese reino junto con Jin.

Si era verdad sobre su reino no quería que Hoseok y Jin salieran dañados.

Hoseok se había negado miles de veces, quería acompañarlo pero el mayor tenía razón, no podía arriesgar a su bebé.

"Descuida, solo iré a verla y cuando sepa que está bien volvere por ti". Esas fueron las palabras que dijo JungKook antes de partir y dejar una preocupación enorme a Hoseok.

—El viaje solo dura dos días, descuida nada malo pasará, el reino puede defenderse.

—¿Está seguro?— pregunto con la voz algo contada.

—Si, aquí estarás más seguro, no puede arriesgar a sus dos parejas a esto, es por eso que a usted lo dejo aquí, debes entender que ella está embarazada y es aún más difícil, debe estar pendiente de todo lo que le pase.

«Yo también lo estoy» pensó Hoseok, y era la verdad, él también tenía que estar pendiente de su embarazo y ahora eso era imposible, no podía ir con Taehyung a qué lo revisara, no podía hacer nada.

—Solo espero que ella esté bien.

—Lo estará.— un pequeño golpe en su espalda como muestra de apoyo le hizo sonreír, pues no estaba del todo solo.

•••••

Todo estaba en desorden empezando por las murallas de su castillo, todas estaban derribadas y su pueblo parecía ser un campo de guerra.

No podía creer lo que veía, el viaje había sido lo más rápido que pudo pero aún así no pudo detener lo imposible.

La guerra ya había comenzado y no parecía tener un punto medio en el cual pudieran arreglar todo.

Corrió en dirección a la habitación más grande mirando con un poco de rapidez los pasillos manchados de sangre y los cuerpos en el suelo que eran de sus guardias.

Su cuerpo comenzó a temblar y pensó lo peor, sacudió su cabeza tratando de pensar otra cosa, su esposa aún estaba con vida y la iba a encontrar.

No había ninguna señal de ella y ningún ruido que diera indicios de que estaba con vida, las lágrimas comenzaron a salir y su vista comenzó a tornarse borrosa, eso no podía estar pasando.

Cuando la puerta estaba frente a él sus manos comenzaron a temblar, no quería ver lo que había dentro de ella.

Con miedo la abrió lo más despacio viendo lo peor que pudo imaginar.

Su esposa, la mujer que amaba está recostada en la cama con un corte profundo en su garganta y otro en su estómago.

Su llanto desgarrador fue lo único que se escuchaba en todo el castillo, tomo el cuerpo de su esposa en brazos mirando en su rostro lágrimas secas y su maquillaje algo corrido.

No podía con la culpa, no podía asimilarlo, estaba frente al amor de su vida en un estado en el cual jamás imagino verla.

Y con el leve movimiento sobre su cuerpo una carta salía de sus manos, una la cual Jackson hubiera deseado jamás poner en el cuerpo de la mujer la cual amo con toda su vida.

-J⁷

Silence.[JungHope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora