Los cuatro hijos mayores de papi luchon España: Argentina, Chile, México y Perú, se las verán negras cuando empiecen a trabajar, todo para ganar unos centavos y ahorrar para cuando sean libres e independientes, claro, si papi luchon no les mina sus...
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-Hola, mucho gusto. Mi nombre es Argentina, espero que nos llevemos bien- se presentó el hijo mayor con una sonrisa. El equipo lo miró sin mucho entusiasmo, prácticamente lo barrieron con la mirada.
El argentino había tenido la mala suerte de terminar tomando el trabajo de vendedor en la tienda "United Kingdom of Clothes", él ya sabía que la había cagado cuando se presentó con unos jeans deslavados, sudadera vieja y una playera que decía "sos alto boludo". Su padre trató de advertirle, pero este se negó a escucharlo y ahora, pagaba las consecuencias.
Pero... si por eso lo despedían, podría pasar el verano en casa y jugar sus amados videojuegos ¿no?
En fin, pese a las miradas juzgonas hacia su atuendo, también podía notar un brillo de curiosidad hacia sus astas, cosa que lo hizo mover su cola con energía. Aparte de sus ojos dorados, sus astas eran motivo de su orgullo.
-Bueno...- La que parecía la gerente lo miro de pies de cabeza con un gesto de resignación- Creo que hay algo de potencial. España me hablo bien de ti, así que espero puedas cumplir con las expectativas. Mi nombre es Gales, por cierto.
-Mucho gusto, señora- Argentina sonrió con inocencia.
-Señorita, por favor- lo corrigió la humana con una sonrisa fingida. Eso lo sabía el argento, pues la chica no llevaba anillo y debería estar en sus treinta y pocos, solo quería fastidiarla para que así lo despidieran.
-Te presento a Escocia e Irlanda del Norte, mejor conocida como IN, de cariño. Hay otro chico, Inglaterra, pero él suele cubrir los turnos de la tarde- Conforme los nombraba, los demás empleados inclinaban la cabeza- Escocia, por favor facilita un uniforme para nuestro nuevo miembro y asegúrate de entrenarlo adecuadamente.
-Claro que si – Un señor de piel pálida, parecida a la leche, ojos esmeraldas y de cabello tan rojo y rizado como las raíces de un árbol, le sonrió.
-Una vez que te hayas cambiado a algo... más adecuado para la tienda, te presentaré a los costureros.
-Oki doki- contestó el chico y siguió al escoses. En su mente ya planeaba mil y uno escenarios para ser despedido, lo cual ponía una siniestra sonrisa en su rostro.
Argentina: Venado de las pampas (alfa).
Gales: Humana
IN: Humana
Escocia: Humano
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