Los cuatro hijos mayores de papi luchon España: Argentina, Chile, México y Perú, se las verán negras cuando empiecen a trabajar, todo para ganar unos centavos y ahorrar para cuando sean libres e independientes, claro, si papi luchon no les mina sus...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Su nuevo uniforme consistía en un traje gris, camisa blanca, zapatos negros y una corbata color vino quemado que parecía querer ahorcarlo. Estaba muy incómodo. Tampoco entendía porque tendría que vestirse así si estaría en la trastienda.
Su primera actividad consistió en planchar, enrollar y acomodar las corbatas en distintos canastos. Había sonado sencillo, pero nunca le advirtieron de la grosera cantidad de telas con las que tendría que lidiar. Se quería morir.
Después de lo que pensó fueron horas, Gales regresó con él, evaluó su trabajo y le dijo satisfecha:
-Bien hecho, ayúdame a guardarlas en los cajones de enfrente- la mujer tomo uno de los canastos y lo guio de regreso al local. -Sacas el cajón, tomas la corbata y la metes así- le decía mientras le mostraba la técnica-, cuando termines de rellenarlo, lo vuelves a guardar y ya esta, ¿de acuerdo? Asegúrate de seguir el patrón.
-Vale- respondió sin ganas y se puso a su nueva tarea. ¿Si las ponía al azar, sin respetar los colores, lo despedirían? Total, si la corbata de enfrente coincidía con el esquema de color ¿Quién se preocuparía por las de atrás? "Soy un genio" se dijo mientras efectuaba su plan.
-Disculpa...
-¡Mierda! ¡Pinche boludo, me espantaste!- Argentina estaba tan concentrado que cuando el cliente lo llamó, no pudo evitar reaccionar de esa forma.
-¿Lo siento?- respondió el cliente.
-¡Pues más le vale! ¿No le enseñaron a no molestar cuando alguien esta trabajando?- contestó el joven mientras se llevaba una mano al pecho, como si se recuperara de un infarto- ¿Qué piñas quiere o qué?
-Solo quería ver las corbatas- murmuró molesto el cliente, quien nada más no golpeaba al chico porque no quería lo acusaran de maltrato infantil.
-Con una chucha- Argentina se separó del muestrario y dejo al tipo pasar. El sujeto tomo algunas y las miro con detenimiento, se veía la duda escrita en toda su cara. Estaba tardando tanto que el argentino empezaba a desesperarse.
-¿Exactamente que está esperando? ¿Qué le hablen?- pregunto sarcástico.
-Pues... creo que sí- respondió con angustia y pena el sujeto.
-A ver, vamos por pasos. ¿Pará que quiere una corbata?
-Tengo un evento este fin de semana, es la boda de la hija de uno de mis socios, lo conozco desde hace ya 15 años, de hecho, casi somos familia. Mi esposa y yo esperábamos que nuestros hijos terminaran juntos...
-Bap. Bap. Alto boludo, no dije que me narrara la historia de su vida- lo paró fastidiado el empleado- el evento este, ¿es de día o noche?
-La boda es en el día y la fiesta en la noche- respondió el cada vez más ofendido cliente.
-Pues llévese esta y ya quedo- le mostro una corbata color limón, la persona lo miro con cara de incredulidad- ¿qué? El color esta de moda, en el día se verá alegre y bonito, y en la fiesta destacará por el tono.
