5

5.8K 482 39
                                    

 Pov Nathaniel.

Él sonido de un nuevo mensaje en mi celular me despierta lo tomo porque no deja ser molesto son muchos mensajes, además de que están molestando a rebeca también, al tomar él celular veo que los mensajes son del grupo que tenemos mis hermanos y yo, solos los grupo de la familia y los contactos de alguno de ellos son los que nunca silencio.

Mirando los mensajes me doy cuenta de que son mis hermanos enviándome que se me hará tarde para ir al desayuno, les contestó que ya estoy despierto y que avisen que deben poner otro plato porque Rebecca irá conmigo, siempre y cuando la convenza claro. Dejo él celular a un lado, no debo perder él tiempo, me tengo que dar una ducha.

─No te ocupes del trabajo tan temprano ─ se queja a mi lado.

─No era trabajo, eran mis hermanos, hoy es domingo ─ le recuerdo. Los domingos sin falta todos desayunamos juntos en él jardín de la casa del abuelo, todos sin falta, claro siempre y cuando no estemos fuera de la ciudad por algo relacionado al trabajo.

─Si cierto, su reunión ─ dice ella aun muy dormida.

─No es reunión es desayunar con mi familia, acompáñame ─ le digo y por fin abre los ojos.

─¿Seguro? ─ pregunta ella.

─Por supuesto que sí, somos pareja desde hace mucho tiempo lo más común es que también seas parte de todo esto ─ le aseguro dándole un beso ─ ire a preparar él baño para tomar una ducha juntos, no te duermas de nuevo ─ le digo porque es capaz de hacerlo y voy al baño.

Si, esto molestara mucho a mi abuelo, pero no habrá marcha atrás, anoche le deje muy claro la situación, yo estoy con Rebecca y pienso proponerle matrimonio, él y Dominick no nos pueden obligar a Charlott y a mi a casarnos si no queremos. Cuando verificó que él agua está bien, voy por Rebecca y la encuentro sentada en la orilla de la cama, pero de mi lado, con la mirada muy pensativa le diría que un poco molesta.

─Becca, ¿qué pasa? ─ le preguntó. Cuando le hablo su mirada deja de estar perdida, pero puedo notar que algo la está molestando.

─Estaba pensando en algo, siéntate un momento ─ me dice ─ será rápido ─ me dice cuando ve que dudo porque se nos hará tarde, pero cedo y me siento ─ ya tenemos dos años de relación....─ asiento para que continúe ─ ¿no has pensado de que sería bueno que avanzara mos en nuestra relación? ─ me pregunta ella y la verdad es que me sorprende mucho su pregunta, ya que ella es la que siempre dice que lo llevemos con calma y respetemos los límites del otro.

─Por supuesto que sí y dime, ¿qué propones? ─ le preguntó.

─Vivir juntos ─ dice.

─¡Si, claro que sí! ─ acepto, esto es estupendo ─¿cuándo quieres mudarte?─

─En una o dos semanas hay mucho que debo de recoger ─ me dice.

─Eso no es problema, podemos contratar a alguien que se encargue de toda la mudanza ─ le aseguro y la abrazó de nuevo ─ esto es maravilloso Becca, ven, vamos a bañarnos para irnos y contarles a todos que vamos a vivir juntos ─

Los siento abuelo, pero no me harás cambiar de opinión.

Casi cuarenta minutos después estamos atravesando la puerta que da al jardín donde está puesta la mesa para disfrutar de esté hermoso domingo de finales de abril.

─Buenos días ─ saludo a todos y Rebecca también, todos contestan y la molesta y seria mirada del abuelo es la estrella de la mañana, Cedrick disimula la burla o eso intenta más bien.

─Ya llegaron siéntense ─ dice mi madre, miro a mi padre y él solo negó levemente, cómo si me estuviera diciendo que me estoy metiendo en un lugar peligroso, se que lo estoy.

Nathaniel Litman ◇Herederos Litman 2◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora