Nathaniel Litman ◇Herederos Litman 2◇

21

Pov Charlott 

─Tienes justo la cara que aquella ocasión cuando él maestro me puso hacer un trabajo con Lenard James ─ digo divertida, tiene la misma mirada asesina de esa ocasión.

Estamos en él departamento de mi abuelo, más específicamente en mi habitación mientras me cambio de ropa para ir a almorzar con Tanner, eso es lo que tiene molesto a Nate, aunque decir molesto es quedarse corto, él está a poco de echar humo por las orejas, no puedo evitar que me resulta adorable su actitud. 

Más también intento entenderlo, porque si la situación fuera al revés también estaría igual de molesta porque él se iría a ver a otra mujer, por lo tanto intento no molestarlo demasiado con él tema.

─Lenard era completamente inofensivo, esté maldito no ─ dice serio ─ re aviso que aparte de Manuel habrá otro escolta que estará al pendiente de ti ─ me dice.

─Eso es algo exagerado ya Nate ─ digo colocándose los aretes. 

─Nada es exagerado su es para cuidarte ─ dice seguro ─ ellos son completamente impredecibles para nosotros, por lo tanto debemos estar un paso delante de ellos, por lo tanto ─ se levanta y camina hacia mi tomando mi rostro entre sus manos ─ habrá alguien más cuidándote mi conejita ─ besa mi nariz, yo la arrugó en desacuerdo con lo que está haciendo, pero no discuto.

Está en los ganes Litman o yo que se, al parecer no puedes evitar ser las personas más sovreprotectoras del mundo y aunque es algo muy lindo que se preocupen tanto por las personas que quieren también puede ser algo asfixiante, en especial si no estas acostumbrado a algo así, yo lo estoy más o menos, porque mi adolescencia fue de está  manera, pero cuando me fui, y aunque no estaba libre en realidad, porque tenía escoltas vigilando cada movimiento que daba, para mi yo estaba libre, sin esa presión encima, porque es una presión.

Tener a una persona contigo todo él tiempo, resulta molesto, aunque no intervenga pasara casi nada en lo que haces, pero sabes que está ahí, es incomodo, al menos para mi lo es.

─En cuanto termine de almorzar con él te llamo y te cuento todo ─ le prometo ─ mientras tanto juega basquet con tus hermanos para distraerte ─ le recomiendo, dándole un corto beso, ya es momento de que me vaya.

Con Tanner acordamos reunirnos en él restaurante, nada muy elegante ni nada parecido. En un lindo restaurante no muy lejos del departamento de mi abuelo que es estilo abierto, así que los escoltas nos podrán ver sin problema para más o menos la calma de Nate.

Manuel ya está listo cuando bajo y me despido de Nate de nuevo antes de subir al auto para ir al dichoso almuerzo .

Al llegar y dar mi nombre me guian a una mesa, Tanner aun no ha llegado, así que sacó mi celular para ver los mensajes, específicamente los mensajes de mi editar que no está nada contento con que cancele nuestro contrato, pero no hay nada que me pueda decir que me haga cambiar de opinión, ya es una decisión tomada, además de que el y yo no tenemos nada de que hablar, desde ahora son nuestros abogados que hablaran.

─Hola Charlott ─ me saluda Tanner de repente, no lo escuche al llegar y él aprovecha él momento para darme un beso demasiado cerca de mi boca ─ espero no hayas esperado mucho ─ dice sentándose frente a mi.

─No, para nada ─ contestó dejando pasar él anterior momento.

Un camarero se nos acerca ofreciéndonos la carta y mientras la revisamos nos sirve agua.

─Me alegra mucho de verdad que hayas aceptado que saliéramos, la verdad pensé que no lo harías ─ me dice él después de hacer nuestra orden.

─Bueno, acepto que tarde mucho en contestar, pero, ¿por qué piensas que no lo haría? ─ le preguntó con interés. 

─Por Nathaniel ─

─¿Que tiene que ver él? ─

─Que no le agrado ─

─Pues es algo entre ustedes dos, yo no tengo nada que ver ─ contesto tranquila.

─Me alegra saber que piensas así ─ dice él con media sonrisa.

Lo siguiente es que hablamos de todo un poco, cuando preguntó por su familia, dice que creció solo con su madre y que no sabe quién es su padre, además nunca le interesó conocerlo. Es muy bueno para mentir, no duda ni por un momento de lo que dice. 

─¿Ya has decidido si te quedaras?─ me pregunta cuando esperamos él postre.

─Si, me quedaré ─ contestó.

─Fantástico, nos podremos seguir viendo ─

─Me parece bien, quiero volver a hacer amigos en la ciudad ─ comentó.

─Yo no lo digo con la intención de ser amigos Charlott ─ dice él. En serio qué clase de persona es él y Rebecca también, que no le importa estar con alguien más y lo hace así tan fresco, cuando ellos se suponen tienen una relación, están con otras personas y en nombre de una venganza se la que no tienen razón. 

─Yo no puedo verte de otra forma ─

─¿Por qué no?, ambos somos solteros, ¿por qué no nos damos la oportunidad? ─ 

─Ya te había dicho que no soy completamente soltera ─ le recuerdo.

─El acuerdo matrimonial entre Litman y tu, cierto ─

─Para solos ser simples compañeros de trabajo, tu y Rebecca se cuentan cosas muy personales ─ comento ladrando un poco la cabeza.

─Ammmm….bueno….─ se pone incomodo porque sabe que ha hecho mal en decir lo que dijo. 

Para suerte de él mi celular empieza a sonar, es Nate.

─Diga ─

─Un almuerzo no tiene que durar tanto ─ se queja él.

─Si él tiempo compartido con la otra persona es agradable, él tiempo es completamente irrelevante ─ le digo sinple, que puedo decir, me encanta molestarlo.

─Conejita no me provoques ─

─No puedes hacer nada, lo sabes, así que mejor deja todo cómo está, cuando tenga más información por parte de la otra parte te la hago saber, así que hablamos en la noche ─ digo y cuelgo sin esperar respuesta.

─¿Problemas? ─ pregunta, seguramente con la intención de desviar él tema anterior.

─Los de mi antigua editorial no quieren dejarme ir ─ comento.

─Eres una excelente escritora, claro que no quieren perderte ─ dice.

─¿Cómo puedes sabes que soy buena?, escribo bajo un seudónimo ─ 

─Vaya, a ti no se te escapa nada ─ dice el.

─Hago todo lo posible para que nada se me escape ─ me encojo de hombros.

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Pov Nathaniel 

─Hermano deja que Erick juegue, tu no estas en él juego ─ me dice Cedrick, a modo de distracción después de terminar él almuerzo y hablar con mi Conejita, además de saber que ellos siguen juntos.

Mis hermanos y yo nos pusimos a jugar Tenis, Alexa y Alexia, contra Cedrick y yo, cualquiera diría que es un juego disparejo, pero lo estarían diciendo porque no conocen a mis hermanas y los despiadadas que son en él juego es especial Alexa, ella no falla.

─Esta bien, Hermano releva me ─ le paso la raqueta a Erick y quién la toma y se levanta para jugar.

─Nathaniel deja de comportarte de esa manera, parece que no confias en ella ─ me dice él abuelo.

─Confío ciegamente en ella abuelo, en quién no confío es en él, tiene muy malas intenciones hacia nosotros, no me puedo sentir tranquilo sabiendo que ella está con el aún ….