7

5.9K 552 27
                                    

Pov Nathaniel

─No luzcas tan ansioso hermano ─ me dice Erick mientras estamos en mi oficina, estamos terminado de revisar unos documentos de los negocios que tenemos en Berlin, no se lo he dicho a mi conejita, pero yo soy quién maneja las empresas de su familia, su abuelo ya no puede seguir con dichas responsabilidades, así que yo lo estoy haciendo, en todo caso es casi lo mismo porque son nuestros socios.

─No estoy ansioso ─ niego.

─Sí cómo no ─ se burla Cedrick.

─En esté momento me gustaría ser hijo único ─ me quejo.

─Quejate con nuestros padre entonces ─ dice Erick.

Si, no lo quiero aceptar, pero estoy ansioso de que ya sea la hora de ir a la casa para él almuerzo que él abuelo organizó para darle la bienvenida a Charlott, según su escolta se levanto un poco tarde y salio a dar un paseo, fue a todos los lugares que íbamos de adolescentes, en ese informe, él escolta me dijo que vio a Rebecca, estaba en él parte con un compañero de su trabajo, Tanner, no me agrada ese tipo, no se exactamente porqué, pero algo en él no me cuadra.

Se lo mencioné un par de veces a Rebecca y dijo que eran celos sin fundamento de mi parte porque él solo era un compañero de trabajo y un amigo, nada más, además que soy demasiado paranoico con la gente, tal vez, pero tengo muchas razones para serlo.

En fin, dijo que ellos estaban en él parque también y no me conto nada más porque a los minutos de ellos llegar Charlott se empezó a alejar de él lugar y ella es su prioridad, después de recorrer él parque fue a una tienda donde se compró algunas cosas y ahora está de nuevo en él piso de su abuelo en él centro.

Intento no estar nervioso, no debería de estar nervioso, aunque tenemos mucho sin vernos a la cara directamente, sin una pantalla de por medio, si hablamos mucho entre nosotros, nunca perdimos él contacto por lo que mis nervios y ansias por verla me parece que está un poco de más en está situación.

Ignoro completamente las burlas de mis hermanos, o más bien las de Cedrick, Eric no es tanto de bromas y solo hablo si es algo de trabajo.

─Esto no es posible ─ se queja Erick en un momento.

─¿Que pasa? ─

─Emilio pasa ─ dice con odio.

─¿Volvió a robarte otro chef? ─ pregunta con interés Cedrick.

Erick tiene una cadena de restaurantes de lujo y su mayor rival en esto es Emilio Manchego, y ese tipo no juega limpio en lo más mínimo, en más de una ocasión, no sabemos cómo aún le a robado las ideas a mi hermano, además de sus mejores chef, lo que pone a Erick de pésimo humor y lo pagan los empleados.

─Si me volvió a ganar a otro, pero lo que no sabe es que le voy a pagar con la misma moneda que me ha jugado ─ dice él con suficiencia y tanto Cedrick cómo yo lo miramos llenos de interés ─ sus restaurantes la verdad no son tan llamativos por sus plantas principales, lo son por sus postres ─

─Lo contrario de tu restaurante ─ digo y asiento.

─Exacto, nuestro comensales dicen maravillas de los platos y entradas, pero del postre es algo que nos gana un poco, entonces empiezan a alegar que no les damos la experiencia completa que esperaban, pero, con él, aunque la cena estuvo más o menos, los embobada con él postre ─

─Asi que supongo que piensas contratar a ese chef ─ digo.

─Si y es ella, es una muy aclamada chef repostera, tiene 24, en muy poco tiempo a demostrado tener un gran talento, por lo que es muy solicitada ─ nos cuenta.

Nathaniel Litman ◇Herederos Litman 2◇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora