36: Trampa.

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    — Por fin has venido, Hyeju. Traje el cambio de ropa que pediste. No sé si esto sea de tu talla pero es lo único de "tu estilo" que creí podría gustarte. 

    — Gracias Heejin, lo necesitaba. Esta tarde estaremos muy ocupadas.

    — Si quieres te cambias en el baño del metro, nos verían raro si viajas con uniforme... — le extendió la bolsa de papel  con ropa de segunda mano. 

    Ambas entraron al baño de la estación, Hyeju se fue directo a un cubículo y Heejin se quedó contemplando su reflejo en el espejo:

  "Parezco una chica cualquiera, nadie sospecharía que he asesinado gente por encargo. Creo que me sienta bien la vida de  estudiante". 

  Sus pensamientos fueron interrumpidos por Hyeju, que azotó la puerta accidentalmente cuando trataba de arrojar su uniforme a la basura: 

   — ¡Oh vaya! Te armé una buena combinación, debería dedicarme a estilista. 

    Una tímida sonrisa se dibujó en su rostro ante el comentario de su compañera. La agente Son, modelaba un ajustado pantalón gris y una blusa manga larga negra. Su acompañante se sorprendió al ver su espectacular figura y le invitó a tomar el metro que las llevaría a su destino. 

  — ¿Cuándo será  lo de Swam? Hyeju. 

  —  Cállate, no hables aquí que podrían escucharte... 

    Después de un silencioso trayecto, llegaron a  una bodega lejana a la ciudad y ubicada en medio de la vegetación. El sitio estaba construido con ladrillos mohosos y del techo colgaban telarañas que indicaban la antigüedad de lo que fue una casa de campo, ahora ocupada como una sencilla bodega de explosivos y armas de gran alcance. Las jóvenes se sentaron en  los polvosos sillones y se vieron los rostros descompuestos.  La menor rechinaba los dientes al mismo tiempo que golpeteaba la punta de uno de sus zapatos contra la pata de una mesa de estar rota. 

    — Chuu olvidó cómo llegar hasta acá, tiene tan mala memoria y tantos almacenes escondidos que es difícil administrarlos sin ayuda;  y bien ¿qué más has estado pensando, Hyeju?  

    — Ayer hablé con ella y está decidida a destruir la compañía mañana.  Me dijo que  entorpeciera la investigación, como siempre... Además, mencionó que abandonaste Edén ¿es eso cierto?

    — ¡Por supuesto!, me dediqué por completo a mis clases de inglés, ya domino el verb to be y el nivel básico — sonrió orgullosa. 

   — Me alegro que hayas encontrado algo que te apasione. 

    — Por cierto, ¿recuerdas los documentos que me diste la última vez que nos vimos? Chuu  me los tiró en la cara,  dijo que tu trabajo era un asco... ella mencionó algo sobre una tal comisaria y detective. La verdad, me escapé antes que me presionara a hacer algo indebido...

   — Chuu atacó a dos de mis compañeras... sus heridas son de gravedad, están hospitalizadas... — suspiró llevándose las manos al rostro. 

   — No tiene compasión... jamás pensé que lo hiciera tan rápido, si lo hubiera sabido antes, quizás ellas no estarían al borde de la muerte; pudimos haberlo evitado con algún plan — sollozó desconsolada. 

   — Debemos permanecer fuertes — limpió los restos de tristeza y golpeó amistosamente el hombro de su compañera —: mañana nos encargaremos de Chuu,  por fin vengaremos a quiénes han sido sus víctimas. Nuestro plan será un éxito, ella no escapará...

   — Si no se rinde y arrepiente, juro que le dispararé... no por nada sigo siendo una criminal...— sentenció amargamente. 

   — Eso será nuestro último recurso...

   — Hyeju, ¿qué son esos papeles que trajiste?

  —  Es parte del expediente  Edén.

  —¿El original? ¿En serio se lo darás a Chuu?

  — He robado parte del expediente físico que tenían en jefatura.  Le mentiré  a Chuu diciéndole  que esto es todo lo que tenemos; pero en realidad, hay más información sobre Edén en la  base de datos digital. También tengo unas pruebas  que la incriminarán: creé un registro de ADN gracias a una muestra de sangre, y los resultados se los dejé en el escritorio a Chaewon. 

  — ¡Qué astuta eres! 

  — Puede que sí, no dormí en dos noches por analizar su estúpida sangre  en el laboratorio de la estación...

  — Tampoco te bañaste ¿verdad? — interrogó alzando una ceja. 

  — Usé las duchas de la sala de autopsias... Por eso te pedí el cambio de ropa. Estoy segura que Chaewon y la división harán un buen trabajo. No tengo el valor de enfrentarlos...  

  — Lo imaginaba. Sabes Hyeju, no me importaría terminar en la cárcel o muerta, pero no soportaría que Chuu continuase con su legado de violencia. Cuando conocí a Hyunjin, me di cuenta que hay esperanza más allá de la oscuridad. 

  — Mi hermana... — sonrió nostálgica —.  No me despedí de ella personalmente antes de venir aquí. 

  — Yo le dije que iría de vacaciones porque el curso de inglés me estaba matando y a pesar de lo repentino que fue,  me deseó unas lindas vacaciones. Le animé a hacer su mejor esfuerzo para cuando comience la campaña publicitaria de Swam. 

  — Con el atentado no creo que lleven a término las promociones...

  — Ella estaba muy emocionada. Mencionó que la directora de publicidad es muy amable. 

 — Habrá sido Sooyoung, quizás.

 — ¿Sooyoung?

  — Es la publicista de Swam, la conozco por Chaewon. 

  — Oh bueno, son muchas coincidencias.

 — ¿Sabes qué más es Sooyoung? Es la exnovia de Chaewon y la novia actual de Jiwoo.  

  Un gesto de  horror se asomó en la cara de la chica del vestido y un sudor frío recorrió su espalda. Fijó su vista en la inexpresiva Son Hyeju y preguntó:

  — Si Chuu  quiere tanto a esa mujer, ¿por qué atentará contra Swam sabiendo que ella trabaja ahí?

  —Porque confía ciegamente en que Sooyoung  sólo se desempeña como jefa de publicidad...


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Heejin se ve tan linda en esa foto teaser <3

Por cierto, esta es la foto de Hyeju con ese outfit:

Por cierto, esta es la foto de Hyeju con ese outfit:

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Hyeju pelirroja te extraño...

Identidades Difusas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora