MOON WOLVES❞ ksj;knj [1 Y 2]

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—Jungkook ha logrado destruir dos bases enteras con la ayuda de los alfas hermanos de Yangtae— avisó Hoseok— y están intactos, ya vienen para acá.

El resto, a excepción de Namjoon, se habían ido en búsqueda de lo mismo con el resto de las bases, Hoseok decidió quedarse.

Yangtae no despertaba y aunque Seokjin tampoco quería irse, Namjoon le dijo que prefería que fuese él pues tenía mejores habilidades de pelea y su lobo todavía estaba necio y reacio a mostrarse en combate.

Habían llamado a la médico del clan solar, ella revisó a Yangtae y les aseguró que estaba bien, los cachorros estaban bien y ella muy sana, entonces no entendían porqué seguía dormida. Se aseguraron de pedirle a la médico revisar si no le habían inyectado alguna cosa que la durmiera y de nuevo la respuesta fue negativa, su cuerpo se encontraba limpio.

—No comprendo esto.

—Ojalá pudiese darte una respuesta, pero estoy igual de confundido que tú— rascó su cabeza— iré por Dani y Erin, ellas podrán ayudar a cambiarla, Yangtae confía en ellas.

—Por favor.

Asintió, dejándolo con Yangtae. Namjoon acarició sus mejillas, se suponía que la llevarían de vuelta al clan esa misma noche para que estuviera cómoda en un hogar propio, comiendo las preparaciones deliciosas de Nana y ellos haciendo todo lo posible para compartir con ella y cuidarla.

Estaban intentando hacer de su ambiente uno sano y seguro, eliminando todas las amenazas posibles.

—Mi omega...— murmuró, suspirando por la preocupación— mi sol.

Observó la mordida de Seokjin en su brazo y sintió un poco de alivio, no le dolía, no punzaba y tampoco estaba de un mal color en particular, le dio un vistazo a la de Yangtae e igualmente, todo en orden, intacta.

Sonrió pensando en que lo más probable es que esté tratando de no sufrir heridas para no alertarlos. Amaba tanto a su alfa y omega, pasó de ser extraño a no verse viviendo en un panorama distinto, no podía pensar solo en Yangtae, también Seokjin ocupaba su mente las veinticuatro horas. Ambos eran indispensables para su existencia.

Hoseok volvió a entrar, su expresión de confusión siendo más grande que antes.

—¿Será por el embarazo?— dijo.

Namjoon arrugó el entrecejo.

—¿De qué hablas?

—Mis omegas también están dormidas, intenté despertarlas y bueno, ha sido en vano— se cruzó de brazos— las dos están en cinta, con unas pocas semanas más que Yangtae.

—¿No dice nada en tus libros sobre lobos astrales?

—Lo dudo, aun así voy a buscar y haré que las revisen. Puede ser...— rascó sus brazos, nervioso— ¿Tú qué crees? Algún tipo de hibernación.

—¿Me insinúas que Yangtae no despertará hasta no dar a luz?

—Sí. Hombre, que estoy nervioso, no me prestes atención y... carajo, voy a ir a buscar. Deja de hacerme preguntas.

Volvió a irse. Namjoon se sintió el doble de nervioso, no era buena idea sacar conclusiones propias respecto a lo que estaban viviendo.

—Namjoon— saltó en su lugar.

—¡¿Qué?!

Le miró.

—Creo que han entrado al clan.

—¿Por qué dices eso? ¿Quién?

Parpadeó, intentaba mantener la calma.

—Mis guardias están en el suelo, Namjoon— se alertó— trae a Yangtae, tenemos que colocarlas en un lugar seguro e ir a revisar para despejar dudas.

—Demonios, no entiendo cómo-

—Las murallas no están terminadas todavía— se levantó, cargó en brazos a la omega y siguió a Hoseok— entrar aquí, a este palacio, es difícil, Jungkook y el resto deben estar por llegar.

Le vio entrar a la habitación y cargar a ambas omegas, cada una en un brazo, no mintió, estaban dormidas.

—¿Qué tan seguro es el lugar a donde las llevamos?

—Muy seguro, no tiene forma de entrada, la puerta solo accede con reconocimiento de ojos. Mis ojos.

Tenían que colocar a todas las omegas a salvo.