MOON WOLVES❞ ksj;knj [1 Y 2]

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Yangtae se había ido con Halley y Eunyeong a pasear por el clan, lo que dejaba espacio para los líderes hablar de sus problemas, esos que nunca faltan.

—Ninguno ha encontrado algo— Taehyung gruñó— y no creo que encontremos a un hombre tan viejo, ya debe estar muerto.

—Tal vez, pero en tantos años, si murió, tuvo que dejar a alguien a cargo— Namjoon se apoyó en Seokjin, este lo recibió, haciendo cuentas en su cabeza— muerto o no, debemos seguir alerta y continuar buscando. El domingo encontramos a un alterado en el cine, los chicos identificaron la amenaza en menos de dos segundos y Jin fue junto a Jung-Su para atraparlo.

La razón por la que estaban detrás de las omegas astrales— Yangtae y Eunyeong— era por la fertilidad de estas, si ellos buscaban seguir con el crecimiento de alfas alterados, necesitaban omegas fértiles y fuertes que trajeran buenos lobos al mundo.

Lobos alfas como Kang-Dae y Jung-Su que eran fuertes y habilidosos desde muy pequeños.

Seokjin entrecerró los ojos y acarició el cabello de Namjoon, asintiendo después de que no se apartó del toque sino que se acostó en su pecho. Tendría su celo en dos días, por eso estaba buscando tanto contacto y afecto.

Por la puerta principal entraron sus mencionados hijos, dándose golpes y patadas entre ellos pues a eso le llamaban jugar.

—Si Yangtae los ve...

Eso logró separarlos, buscando con la mirada a su madre y planeando un discurso de disculpa.

—¿Dónde está mamá?— Kang-Dae llegó a lanzarse al regazo de Namjoon y así mismo Jung-Su acaparó a Seokjin, el resto de alfas burlándose de lo pegajosos que eran ellos dos— No hay entrenamiento hoy, el alfa que nos entrena se fracturó algo.

—Y no tenemos tarea gracias a que alguien en el salón enredó a la maestra contando historias, así que no vimos clase y...

—Pasó algo raro.

—Si, muy raro. Tenemos que investigar a un chico que entró...

—Nuevo, a clases— Seokjin se acarició las sienes— y vive solo, no tiene familia, ni nada, no sabemos cómo entró.

—Uno a la vez— pidió Namjoon— que uno de los dos cuente la historia, ya le dieron migraña a su padre.

Hoseok no podía más con la risa, ambos chicos se giraron a ver a Seokjin.

—Per...— inició Kang-Dae.

—Dón— y terminó Jung-Su, la carcajada de Jimin llenó la sala— pero eso es todo. Íbamos a contarle primero a mamá, pero no está.

—¿Y Eunyeong?

—Salieron. La Nana llegará en unas horas, no vamos a perturbar más el tiempo libre de Yangtae.

Se observaron entre los dos, preocupados.

—Bueno, sabemos hacer cereal.

—Si.

—Si tienen hambre— opinó su tío— vayan a cambiarse y vamos todos a comer a algún restaurante cerca.

Ambos chicos dependían mucho de Yangtae, a veces incluso, a la hora de tomar decisiones, debían consultarlo con su madre.

—¿Y qué comeremos? Es martes, no podemos comer pollo los martes, mamá nos prepara carne, mucho arroz, ensalada de fruta.

—Pues piden eso en el restaurante y listo. Apúrense.

Namjoon sabía que terminarían llamando a Yangtae a preguntarle si podían comer pollo frito. Jungkook bufó viéndolos irse y Jung-Su sacando su celular.

—Yangtae los tiene muy consentidos. Son como su pequeño equipo de soldados y ella es la capitana.

—Siempre han sido así— Seokjin aseguró— si a Yangtae se le antoja un elefante, van a buscar uno para ella. La aman mucho.

Yoongi sonrió.

—Ella es una omega madre excelente, se merece que sus hijos la amen y cuiden de forma tan devota.

Todos estaban de acuerdo en que Yangtae era la omega cabeza de hogar perfecta.