MOON WOLVES❞ ksj;knj [1 Y 2]

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—¿Se durmió?

Yangtae asintió, Namjoon había cerrado los ojos en el momento en que lo cubrió con las sábanas.

—Ve a comer algo antes de que despierte y salga a buscarte.

—No tengo apetito, honestamente, ya comí el triple para evitar tener que levantarme.

La vio moverse con cuidado para no tocar a Namjoon y casi se rió, a él no le gustaba que lo tocaran o molestaran mientras tomaba su siesta en su celo, Seokjin la recibió en sus brazos y suspiraron al tiempo, viendo a sus manos unidas.

—¿Crees que los chicos estén bien con Hoseok?

—Están más que bien, ellos aman ir al clan solar, específicamente para pasar el rato con los hijos de este, además, Yahír está con ellos. Al menos podemos estar seguros de que están protegidos y que nuestra Eunyeong está rodeada de buenos alfas.

—Sus hermanos no dejarán que la toquen.

—Lo sé.

La cabeza de Seokjin dolía por tanto pensar, cuidar a dos omegas especiales era una de las cosas más difíciles que vivían en su día a día, se preguntaba a cada instante si estaba haciéndolo bien.

Moriría si algo le sucedía a su omega solar y a su pequeña omega lunar. No podría ser tan fuerte como siempre se mostraba y eso era algo que hablaba con Namjoon todo el tiempo, ambos tenían la misma angustia.

Para ellos ya no era normal ser dos en lugar de tres.

—¿En qué piensas?

—Mm, nada, en que te amo mucho, en que Namjoon y yo no seríamos ni la mitad de felices sin tí— aquellos ojos brillantes y dorados le sonrieron—en que nos has dado tres hijos maravillosos y que comprendo perfectamente la envidia del resto de los alfas de estos clanes, ellos no tienen una Yangtae en sus vidas.

—No tienen una Yangtae, pero si tienen omegas maravillosas.

—No desmerito el valor de otras omegas, solo digo que ninguna se compara a nuestra omega.

—¿Qué le pasa a mi amor gigante?

Namjoon sonrió, negando, Seokjin no tenía vergüenza a la hora de expresar su amor por el alfa en público, poco le importaba lo que el resto pudiera opinar sobre las muestras de cariño entre ambos líderes.

—Me duele la cabeza.

—¿Y qué esperabas si no te quedaste en cama luego de tu celo?

—Tengo trabajo.

Entraron a la oficina del menor, Seokjin cerró con seguro la puerta y lo alcanzó.

—El trabajo puede esperar un poco más. Estoy seguro de que Yangtae vendrá más tarde a ver cómo sigues.

—¿Vas a salir?

—Tengo que ir a revisar el sur de las murallas, hay problemas, pero, no saldré de nuestros territorios— asintió— Namjoon, vuelve a la cama, tu celo no ha finalizado, tienes una última ola de calor sin saciar.

—Ya se me pasará, lo peor que puede suceder es que mi lobo se moleste conmigo por tres días, esa es su huelga en mi contra— Seokjin no le hizo mucho caso, comenzando a besarlo un poco— Jin...

—Yangtae vendrá y terminará lo que yo empiece aquí.

—Dijiste que vendría más tarde.

—Mentí, llega en diez minutos— lo hizo levantar de un tirón, rodeó su cuello con ambos brazos y se adhirió a Namjoon— hagamos algo por ese dolor de cabeza, alfa necio.

Namjoon apoyó ambas manos en su escritorio y se dejó hacer, Seokjin era, de los tres, el verdadero pilar de su relación, el centro que los mantenía unidos y felices. Aquel hecho era algo en lo que tanto Namjoon como Yangtae estaban de acuerdo.

—Puede entrar alguien.

—Se llevará un buen show en ese caso—rió— puse el seguro, solo llegará Yangtae.

Volvieron a la disputa de besos, tendría que obedecer y hacer al trabajo esperar.