𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄, negan

𝟶𝟾‖ ᴘᴀʀᴛɪᴅᴀ ᴅᴇ ʙɪʟʟᴀʀ

Los hombres se miraron antes de levantarse a la vez. —Entrad en aquella casa y sacad la mesa de billar—. Ordenó la mujer a dos Salvadores que hacían la guardia en aquella calle.

Unos minutos después salían de la vivienda cargando la mesa hasta los tres. Tanto Negan como Spencer sonrieron al verlo, y el segundo se acercó para prepararla para la partida.

—Con Rick no podríamos hacer esto. Seguro que se quedaría frunciendo el ceño y echándome esa mirada antipática suya—. Comentó Negan mirando a Raven.

—Y por eso he venido a veros yo. Quiero hablaros de Rick—. Informó Spencer. A sus espaldas, varios residentes de la comunidad comenzaron a acercarse, entre ellos Rosita.

Negan se giró hacia Raven, mirando el palo y luego a ella preguntándola así si quería jugar. Ella negó, bebiendo de su baso y haciendo una señal a Spencer para que continuara.

—Entiendo lo que queréis hacer aquí, lo que queréis construir. No digo que me gusten vuestros métodos, pero lo entiendo. Creáis una red en la que cada uno contribuye al bien general. Tiene sentido. Pero os diré, que Rick Grimes no tiene buena fama de trabajar bien en equipo.

Raven observó cómo jugaba Negan mientras escuchaba al hombre, compartiendo miradas con el primero cada vez que hacía una buena jugada.

—No me digas...— Comentó Raven.

—Rick no era nuestro líder anterior. Era mi madre. Lo estaba haciendo muy bien. Pero murió, poco después de que Rick llegara. Igual que mi hermano y mi padre.

—Con que todo iba de maravilla hasta que llegó el gran Rick Grimes. Te quedas huérfano y pierdes todo lo que creías tener.

—Es la historia más triste que he oído—. Comentó Negan. —Tienes suerte de que ya no esté al mando.

Spencer se disponía a hacer su movimiento, pero al escuchar aquello, se detuvo. —No importa. Tiene el ego descontrolado. Hallará la forma de estropearlo, de hacerlo a su modo, de tomar el mando. Lo hizo con mi madre y lo volverá a hacer—. Finalizó realizando su jugada.

Raven miró al líder de los Salvadores, quien ya la estaba mirando mientras se llevaba el baso a la boca. —¿Y cómo propones tú que evitemos eso?— Preguntó la mujer a Spencer.

—Soy hijo de mi madre. Y seré tan buen líder como ella. Es lo que necesita este sitio. Y vosotros también—. Contestó señalando a ambos.

—Lo que me estás diciendo es que te ponga al mando.

—Todo iría mucho mejor.

—Ya. Pero la cosa es que él está ahí fura, buscando cosillas para nosotros. Y aunque haya dejado muy claro que nos odia, cosa que es mutua por mi parte, ahí está—. Comenzó la mujer apoyándose en la mesa de billar. —Y luego estás tú. Un tío que espera a que Rick se largue para acercarse a convencernos de que nos manchemos las manos por él y así ocupar su puesto. ¿Me equivoco?— El hombre fue a contestar, pero ella volvió a hablar. —Eso me parecía...

Negan se acercó a la mujer, pasando tras ella mirándola unos instantes antes de aproximarse al hombre. —Te preguntaré algo. Si quieres sustituirle, ¿por qué no te deshaces de Rick tu mismo y le quitas el poder?

—¿Qué? No, no. Yo no-- Yo no--

—¿Sabes lo que pienso? Que tenemos claro por qué es—. Dijo girándose para mirar a Raven antes de volver a mirarle. —Es porque a ti te faltan entrañas.