[Carmen]
Tres semanas después.
Viernes 10:00 AM.
Mi llanto llenaba el lugar, mis lágrimas mojaban la almohada hasta la sábana, me acurruco en la cama aún abrazando la almohada, beso el anillo que Leonardo me dio cuando me demostraba su amor, ahora ya no puedo sentir nada, me dejó en esta casa sola, no duerme aquí conmigo, no se queda en la casa, no llego a verlo por quedarme dormida ya que mis ojos de tanto llorar se cansan, parece que ya no le importo, que ya no me quiere ver, porque no viene a verme y a preguntarme si como, si duermo, si me... si me duele mucho la cabeza.
Lloro con más fuerza mi pecho se agita, lo llamo y no contesta, a nadie le importo, nadie me dice como hacerlo, como arreglarlo, yo sé que fui un poquito mala, pero sigo sin dejar de creer que ellos se lo merecen, sólo Leonardo es el único al que lastimé injustamente, él no tendría que haber estado ahí.
No quiero hacerlo... lastimar a unos amigos sólo para recuperar mi vida de antes y salvarme de la amenaza de Gabriel, intentaré ir a ver a mis padres, intentaré arreglar las cosas con mamá por más que ella es quien estuvo peor, pero tomaré toda la responsabilidad, no sé que pasará, creo que es mejor eso a que quedarme sola en esta casa llorando. Me pregunto mucho si mi prometido está con alguien más, lo mataré, ojalá que sólo lo esté imaginando, pero esto no se parece nada a la promesa que me hizo, él dijo que su amor por mí es para siempre.
Le creí cuando sus acciones por mí me lo garantizaban. Tres semanas sin él, sin sus besos, sus abrazos y sin que me hable, hablaba demasiado eso me molestaba, ahora me molesta que esté tan callado, distante y frío conmigo.
Salgo de la cama, mi apariencia me horroriza, parezco una... no sé mis ojos están increíblemente rojos, hinchados y feos, que horror, lavo mi rostro por un buen rato, quedó un poco mejor, pero se nota mucho que he llorado, hago lo posible por verme bien, salgo del baño, tomé el dinero de Leonardo, seguro no me perdonan y termine "perdiendo la memoria". Luego de llamar a un taxi.
Si... yo en taxi teniendo mi hermoso auto, pero todo es necesario.
Entro en la casa sin ningún problema, me sorprendí mucho al ver a mi pequeño Evan gateando en el suelo con un dinosaurio en su mano, se ve de adorable, me posicione en el suelo de rodillas para besarlo.
Veo a Paula con un chico a su lado se detiene de repente al verme, el chico nos ve a ambas con curiosidad, ella viene hacía aquí molesta.
—¿Qué haces aquí?— preguntó de mala manera como siempre.
Le sonrío.
—Bueno, hola Paula, mi hermanita ¿cómo estás?.
Dio un peligroso acercamiento hasta mí, le respondí levantando mis manos un poco intentando calmarla.
—No vengas aquí a hacerte la buena, Carmen, ya perdiste, todos saben como eres, incluso mi papá y si yo se lo dije todo después de que Luisa me pidiera disculpas por ti, porque no puedes evitarte ciertas cosas zorra.
—Paula ¿tienes una hermana?— preguntó el chico desconocido acercándose a nosotras con una sonrisa amigable me tiende su mano —. Soy Ray, amigo de Paula, que linda eres.
Tomo su mano y le devuelvo la sonrisa.
—Su hermana mayor de hecho, soy Carmen— Paula como una loca nos alejó, casi me golpea de no haberme alejado y que Ray la sujetara lo hubiera conseguido —. Pero Paula no está feliz de verme, que pena. Iré a buscar a mamá, nos vemos.
Me alejo subiendo la escalera escuchando a Ray pedirle a Paula que se controle y a Paula decirme que nadie me quiere aquí y que estaban bien conmigo fuera del lugar.
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Mientras estaba viva
Short StoryCarmen atraída por el dinero y la vida de lujos que puede llevar decide mudarse con su madre a la casa de su nueva pareja, sólo disfrazó su interés con el de sólo querer proteger a su madre argumentando que no toma las mejores decisiones si ella no...