Shiba Yuzuha

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Segunda parte del anterior OS





Pasar los fines de semana en discotecas se convirtió en una actividad aburrida sin su amiga albina, desde que tienen la edad suficiente tomaban los fines de semana para disfrutar plenamente de esos placeres de la vida como disfrutar ciertas bebidas alcohólicas en distintos locales donde bailaban hasta cansarse o hablaban sin parar aunque la música fuera demasiado alta para sus oídos algunas veces

Con la actual lejanía en su amistad impuesta por su amiga como una enorme pared de hielo entre ambos intenta distraerse para evitar deprimirse por una buena decepción amorosa en su vida, con tanto tiempo enamorado resulta difícil acostumbrarse al no tenerla cerca para divertirse esos días disfrutando del estar sentado probando las nuevas bebidas de aquella discoteca donde lo conocen bastante bien

Inconsciente su amigo mesero supo que no debe preguntar por la linda chica que siempre le acompañaba notando su semblante decaído, intentando no mostrarse tan triste en una noche tan animada donde la clientela subió como la espuma

—Fumiya, una chica sumamente linda está viéndote desde hace rato—avisó para intentar subirle los ánimos al chico que le mira dándole su atención

—Debes estar bromeando—respondió acomodándose en su puesto

—Estoy hablando en serio—respondió—Viene para acá, actúa normal, no lo arruines—

—Espera—quiso decir algo más pero pudo sentir la presencia de otra persona en el puesto al lado suyo

Con disimula examino a la chica de reojo, cabello castaño largo estando ligeramente recogido en un moño que deja apreciar sus facciones delicadas pero hermosas, pestañas largas que parecen estar adoradas por rímel, sus labios pintados de un rojo que atrae la atención, sus ojos tampoco son de menos importancia

Una belleza de mujer, sus mejillas se sonrojaron avergonzado por sus pensamientos tan directos

Su voz resaltó entre todo el ruido en la discoteca, una voz que desprende tranquilidad pero también con cierto tono atractivo al oído, ella pidió una bebida que el mesero preparó en pocos segundos recibiendo un audible agradecimiento por parte de l chica

Su amigo mesero le tiró la mirada, dándole a entender que debe aprovechar la situación para no estar como un estúpido llorón por una chica que no sabe apreciar sus sentimientos

—La bebida de la señorita la pago yo—dijo con cierto nerviosismo—Sino le molesta, señorita—

—No me molesta, pero me gusta al menos compartir una conversación contigo—la castaña se apoyó en su mano para mirarlo, verla de frente le dio una mejor imagen de la chica

Dios santo, desde hace tiempo no veía a una chica atractiva al estar enamorado de Senju, pero ahora no duda en pensar en que aquella extraña es una chica preciosa en todo el significado de la palabra

—Antes de empezar me gustaría saber su nombre, yo soy Fumiya ____—extendió su mano

—Shiba Yuzuha, un placer—estrecharon las manos suavemente antes de continuar su conversación

Toda esa noche hablaron tomándose pequeños descansos nada más para disfrutar de la pista de baile, Fumiya siendo arrastrado por Shiba para abandonar aquella barra unos minutos disfrutando del buen ambiente entre ambos sin haber segundas intenciones por parte de ninguno, solo queriendo disfrutar de aquella conexión que están experimentando

Para la hora de volver a sus hogares se despidieron intercambiando números, queriendo mantener esa conexión incluso fuera de la discoteca pudiendo reunirse un día distinto para disfrutar en un ambiente distinto





One-shots Tokyo Revengers II [Male reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora