One-shots Tokyo Revengers II [Male reader]

Bonten

[Contiene spoilers de una línea de tiempo futura]
[Advertencia de contenido explícito]

[¿Cómo es ser un ejecutivo de Bonten agregando que te diviertes un poco con ellos?]

La lluvia cubre la ciudad esa noche, un hombre de cabellos pelirrojos oscuros con ojos marrones baja de un vehículo frente a un edificio cubriendo sus vestimentas con una gabardina oscura, un hombre que trabaja para él sostiene un paraguas apenas se abre la puerta del vehículo para cubrirlo de la lluvia hasta llegar al techo del edificio esperándolo en la entrada con el paraguas cerrado escurriendo gotas frías de agua

—Buenas noches—saludan con formalidad unos hombres armados que visten trajes negros que cuidan de la puerta de la sala de reuniones donde deben estar los altos mandos de la organización, abren las puertas dejando a la vista la enorme sale que tiene un ventanal que deja ver la oscura noche lluviosa

—Hola—se quita la gabardina dejando ver su traje antes de tomar asiento en su lugar correspondiente al lado del ejecutivo y tesorero de la organización que luce tan bien como siempre—¿Cómo haz estado, Kokonoi? Llevaba tiempo sin verte—

—Todo ha estado bien, solo que he tenido mucho trabajos estos últimos días, es agotador—comenta apoyando su espalda de su asiento notando en sus ojos el cansancio que se manifiesta como ojeras

—Qué mal, deberías descansar un poco—apoya su mejilla en su puño cerrado mientras su codo se apoya de la mesa—Podemos tomar una copa de vino cuando salgamos de la reunión, eso te hará dormir de maravilla—dice con una leve sonrisa, Kokonoi reconoce el tono que está utilizando sonriendo igualmente

—Me gusta la idea—por debajo de la mesa alcanza a acariciar la pierna del hombre al lado suyo

—A nosotros ni nos saludas, mal amigo—se queja falsamente el hombre de cabellos morados y mechones azules oscuros cortos, Haitani Ran que al lado suyo tiene a un hombre de cabellos morados con menciones azules largos, Haitani Rindo

—Salude a todos cuando entre, no exageren—ahora les presta atención antes de echar una mirada hacía el resto de la habitación, hasta ahora solo han llegado los Haitani, Kokonoi y él porque son los más puntuales aunque sabe que pronto llegarán los demás

—Vemos que ya hiciste planes para después, nosotros queríamos invitarte a beber—comenta el Haitani mayor con una sonrisa amable que oculta sus verdaderas intenciones

—Será para otra ocasión, qué lástima—dice el Haitani menor mirándolo con sus intensos ojos morados—Como llevábamos tiempo sin vernos—

Comparte una mirada de reojo con el tesorero antes de acomodarse en sus sitios cuando entran los miembros faltantes saludando con normalidad, cuando entre su jefe todos mantienen semblantes serios empezando la reunión que llevo unas cuantas horas hasta darse por terminada pudiendo irse todos a casa

—Fumiya, debes quedarte—esas palabras del albino de ojos negros sorprenden al pelirrojo, el albino de largos cabellos comparte miradas con él hasta que hace una seña de que está esperándolo para su copa de vino a lo que asiente con disimulo

El hombre de cabellos albinos cortos es intimidante, no importa que sea de menor tamaño al suyo siente que se vuelve diminuto bajo su mirada profunda que parece tragarlo en la oscuridad, la sala de reuniones está sola

—Quítate todo lo de abajo y ponte contra la mesa—ordena Mikey con frialdad, sus ordenes se cumplen de inmediato quedando _____ apoyando la mayor parte de su cuerpo en las mesa dejando una perfecta vista de su trasero desnudo con sus mejillas sonrojadas de la vergüenza