capitulo 43

3.7K 236 12
                                    

Sitran Vacolov.

Después de dos semanas de estar en casa y tranquilos, creo que ha sido la semana mas relajada que tuve en mi vida.

Aun que me cuesta decirlo estoy cogiéndole mucho cariño al monstruo que tenemos de niña, ya ha crecido y verdaderamente ha crecido muy rápido, ahora entiendo cuando mi madre no paraba de decir que crecíamos muy rápido y la verdad esta loca también.

Su nombre es otro pero mi nombre para ella es ese Monstruo, y no la llamo así por que me apetece no es que lo es.

El martes pasado se fue arrastrando hasta llegar al salón cuando vio el móvil de Lesla en el suelo y lo cogió y lo metió en el váter del baño que tenemos al lado de la sala.

Tuve que comprar otro teléfono a Lesla, otra vez dinero tirado a la basura, también hizo varias tontearías que lo único que me dan ganas es de tirarla a la piscina para que se muera pero no puedo los poco sentimientos que me quedan en esta vida no me lo permiten.

Aparte de que me quedaría sin huevos por Irina y no me apetece como podéis comprender.

Salgo del baño encontrando a Irina maquillándose y la pequeña cogiendo su maquillaje.

- Lucifer te ha traído a mi, por favor cógela hasta que termine ¡por que no me esta dejando ningún labial rojo bien! - chilla mirando a la niña pero lo único que hace el monstruo es mirarla reírse y aplastar mas el labial entre sus manos.

- Tranquila - voy hasta la tormenta y la cojo en brazos intentando que no me toque con sus manos llenos de color rojo.

>>> - ¿En algún momento te quedaras quieta sin hacer nada que me ponga nervioso? - intento hablar con ella pero lo único que consigo el una cachetada llena de labial en mi cara - te odio - la llevo al baño y le lavo las manos.

- Oye Sitran ¿hoy iras a hacer el recado negro? - pregunta Irina.

- Si tengo que hacerle ver a ese hijo de puta, que lo que se debe se paga por las malas o buenas - le seco las manos a la tormenta y la tiro a la cama y carcajea de la risa, definitivamente le encanta que la tiren a la cama.

- Pues tendrás que lidiar con dos cosas - los ojos se me abren como platos cuando la escucho decir eso, me doy la vuelta bruscamente y la miro.

- No - ella sonríe y asiente - ni lo sueñes, no me voy a llevar a este monstruo conmigo ¿acaso estas loca? - ella se pinta los labios de rojo que me vuelve loco y me mira.

- Sitran no tienes otra salida que quieres ¿Qué me la lleve conmigo al club a matar un viejo que lo único que hace es robarnos dinero atreves de las chicas? - rio y me cruzo de brazos.

- Ah y llevármela a un tiroteo de cincuenta hombre contra cien y todo lleno  de armas y bombas ¿eso es mejor? - la miro sabiendo que voy ganar.

- Déjasela a alguien de tus gorilas que le preste una pistola sabes que le gusta jugar con ellas - sin esperar a que le reproche sale de la habitación corriendo.

- Me las vas a pagar hija de puta - tiro mi saco al suelo sin saber lo que voy hacer.

Me doy la vuelta pero no veo a la tormenta.

- Ahora donde cojones te has metido monstruo - miro debajo de la cama viendo como se ha quedado abajo jugando con su Ferrari.

Si, le compramos un millón de muñecas pero solo las a destrozado, pero cuando vio un coche en la habitación de Sergio ya que tiene una colección se las llevo con ella.

Y desde ese momento no quiere nada mas que no sean coches de Ferrari, definitivamente de grande va ser una reina con coches de Ferrari.

La cojo en brazos llevándomela fuera de la habitación, veo a Lesla hablando con las sirvientas y por lo que veo a la chica asustada así que me acerco a ver que pasa.

YO TU REY Y TU MI REINA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora