Había llevado a Nash a qué conociera a mis padres, se estaban llevando muy bien, pero todavía había algo que me preocupaba.
Estaba apoyada en el marco de la sala viendo a Nash junto a Jules, Aleixandre y Julia cuando sentí unas manos por mi cintura.
—Nash se le ve muy feliz, se lo tomó muy bien.
Debía contarle sobre lo que Nash ya sabía.
—Respecto a eso, creo que tenemos que hablar…
Me giré quedando frente a André.
—Nash siempre supo sobre la familia de Jaiker, Jaiker le obsequió su relicario el cual guarda una fotografía de la familia.
André me miró confuso.
—Jaiker le pidió que nunca dijera nada, por eso nunca les hablo sobre mi familia.
—Por eso nunca dejo que tocaramos ese relicario.
»»—– ♡ —–««
Luego de charlar con André decidí dormir un poco. Me sentía cansada, muy cansada emocionalmente. La llegada de mi madre hizo un caos emocional en mi.
Era muy extraño como una persona con un simple gesto o palabra puede hacerte sentir tan pequeña, tan frágil, tan rota.
Hace mucho no me sentía así, odiaba sentirme así, no solo por el simple hecho de que me afectara a mí, si no que también afecta a las personas que quiero.
Tenía miedo, mucho miedo, no quería lastimar a nadie.
Tocaron la puerta de mi habitación.
—Adelante.
Escuché cómo abrían la puerta y a los pocos segundos el colchón de mi cama se hundió debido al peso. No sabía quién era, no había decidido girarme para ver quién era.
—¿Qué tiene mi princesa?
Me giré al escuchar la voz de mi padre.
—Nada papá solo escucho música.
Mi padre frunció el ceño. Tal vez sabía que estaba mintiendo pero decidió dar caso omiso.
—Nash es un niño encantador, se parece tanto a Jaiker de pequeño, solo que menos mimado y caprichoso.
Reí al recordar las rabietas que hacía por la más mínima cosa.
—Mi niño, lo extraño tanto—dijo con una sonrisa triste en su rostro.
—Yo también lo extraño—tomé la mano de papá—pero ahora tenemos a su hijo, un mini Jaiker que nos regaló él mismo.
Mi padre asintió lentamente.
—Cambiando de tema, ¿Qué tal te pareció André?
—¿André, quién es André?—fingió demencia.
—¡Papá!—chille—hablo en serio.
—Yo también, no conozco a ningún André.
—Andre, mi novio.
Papá hizo un gesto de sorpresa.
—¿Cómo es eso que tienes novio? Tu estás muy chiquita para eso, tengo una nueva regla, no tendrás novios hasta los treinta.
—¿Qué, eso es absurdo?—rodé los ojos—Papá, habló en serio, ¿Qué te pareció el chico que conociste hace unas horas?
—¿Viktor?
—Andre.
—Ahh Eric.
—Andre.
—¿El de cabello azul?
ESTÁS LEYENDO
Te Cielo ♡ [En proceso]
Roman pour Adolescents¿Fue el destino o fue suerte?, no lo sé, tal vez era una simple historia la cual no estaba prevista. Pero a pesar de todos los altibajos que se presentaron en nuestra historia, yo te cielo, compartiendo al infinito y todos sus tonos de azul. Pero, ¿...