3. Él está muerto y no volverá.

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Desde un inicio sabía que este día, no iba ser mi favorito, modelar los diseños es un poco tedioso. No obstante el diseño ya está hecho, sólo faltaban pequeños detalles como nuestras medidas. Mi hermana quiere todo perfecto. Los vestidos de dama de honor Liv los escogió color nute, largos de seda exportada desde Europa y muy elegantes, quiere que todas nos veamos formales y hermosas. En total son seis damas de honor, incluyendo a mi prima Lana y a mí, el resto son amigas de ella.

Aunque no me quejo del todo, ver a mi hermana emocionada por ese día tan especial, es  satisfactorio para mí, ella se merece ser feliz con Philip. Después del pasado tan desastroso que tuvo Olivia, que se haya enamorado de él fue su salvación.

—¿Aburrida? —Mi primo se sienta junto a mí en el taburete, se pasa la mano por su cabello rubio, su mirada va dirigida a la asistente de la diseñadora, ruedo los ojos.

No entiendo por qué Matthew nos tenía que acompañar, creo que con la tía Dana era suficiente. Sé que él y Olivia siempre hacen todo juntos, pero pensé que por lo menos esto no lo iban a hacer.

—Teníamos un trato, necesito ese permiso lo más pronto posible, no lo voy a repetir. —La voz chillona de Lana se escucha a nuestras espaldas. Ella pasa su cabello castaño ahora rubio hacia atrás. Mientras saluda a Matt, intenta hacerlo conmigo pero me aparto. No puedo ocultar mi fastidio. —También me alegro de verte Maia. —Es lo último que dice antes de irse hacia la diseñadora.

—¿No las vas a perdonar nunca? Somos familia Maia, no podemos estar así toda la vida.

"Somos familia"

Ella no lo pensó para decirle a toda la escuela lo que había pasado. Me enoja que siempre sea yo la mala de la historia.

*Noviembre, dos semanas después del accidente*

—¡¿Estás loca?! —Me despierto de golpe al escuchar gritos provenientes de Jay desde el pasillo donde claramente discute con alguien. —¿Cómo se te ocurre sacar a la luz todo lo ocurrido con Maia? ¡Y peor aún en el periódico de la escuela!

Abro los ojos alarmada y siento la sangre irse de mi cuerpo. Trato de levantarme pero al mismo tiempo me mareo, aún estoy mal por el accidente. Me quedo sentada al borde de la cama y escuchando el resto de la discusión.

—No me arrepiento de lo que hice Jaden, así que deja el dramatismo, sino se enteraban de esta forma lo iban hacer por los noticieros. —Esa forma arrogante que ha utilizado los últimos meses, jamás pensé que se comportaría así, pero lo último que dice me termina de destruir. —¡Maia Holister enamorada y ahora viuda de un mafioso! —Grita Lana haciendo énfasis en la última palabra.

Lágrimas caen por mis mejillas, no puedo evitarlo. Él no era un mafioso. ¡Eso no puede ser cierto! Ella no pudo decirle eso a toda la escuela, Lana no es sólo mi prima, la considero una hermana. 

—Cállate, eso no es cierto. Nunca lo conociste, yo si Lana y te puedo asegurar que no lo era. —Responde Jay enojado, pero manteniendo la tranquilidad. —¿Por qué le haces esto a nuestra prima? Ella no esta bi...

—Porque yo me enamoré de él. Aden era perfecto para mí, pero la prefirió a ella. ¿Por qué ella y no yo? Ella no era nadie. ¡Nadie!

Ya no soporto estar escuchando, me levanto sin fuerzas y arrastro los pies hasta la puerta. Me detengo antes de abrirla, coloco las manos en la pared apoyándome y mirando hacia el suelo donde caen mis lágrimas. Hoy se cumple dos semanas del accidente. ¿Por qué te lo llevaste? ¿Por qué quitarme lo único que me quedaba de él? Preguntas sin respuestas que día a día me acompañan. Y ahora escuchar a mi prima hablar de él, de mí. No lo soporto. Nadie tiene el derecho de hablar de nosotros, sólo quiero que respeten mi dolor.

Una Mentira Por AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora