La vida es demasiado complicada aunque se aprende a vivir en ella, la vida de Natasha, Yelena, Kate, Wanda y familia cambiará en un solo segundo, las cosas que ellas apreciaban y amaban se les será arrebatado, aprenderán a vivir en su nueva realidad...
Hela respiró con dificultad, sus piernas temblaban un poco, ya había pasado un largo tiempo en el cuál han estado peleando, claro, aún tienen ventaja pero algunos comenzaban a cansarse, sobre todos los humanos, brujas y uno que otro lobo, curiosamente los vampiros también, nadie se había enfrentado a una guerra como está, Hela arrastró por la blusa a una bruja, alejandola al lugar seguro, luego volvió al campo de batalla, observando a su alrededor, se sentía orgullosa al ver a sus pequeños hermanos ser unos grandes guerreros.
-¡Ah! ¡Me mordieron la cola!-. Gritó Loki soltando un chillido que alertó a sus hermanos.
-¡Te mordieron la cola!-. Se escuchó la burla de Yelena seguida de la risa de Natasha.
Hela solo bufó un poco ignorando las locura de sus hermanos y sus dos nuevas hermanas, eran bastante... Únicos en la manera en que trabajan, por fuera eran todos letales y malos pero en sus cabezas estaban diciendo cada tontería que se les ocurriera pero parecía ser que así les funcionaba y Hela tenía que acostumbrarse a este tipo de dinámica, el enorme lobo negro soltó un gruñido al ver a Alisa caer al suelo con fuerza, siendo jalada de la pierna por un híbrido, rápidamente corrió en esa dirección y rodeo al híbrido que soltó a Alisa mirándola con una sonrisa sádica, Hela mostró sus grandes dientes mirándolo con odio.
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-Hola lobito, ¿Es tu amiga? Que curioso por qué morirá como la vil bruja que es y después... Te mataré a ti-. Aseguró aquel hombre mostrando sus dientes.
-Si, no creo que eso pase-. Dijo Alisa respirando con dificultad para luego patear las piernas del híbrido ya que había cometido el error de soltarla y dejarla sin supervisión.
Hela rápidamente atacó levantándose en sus patas traseras golpeando el pecho del hombre que perdió el equilibrio cayendo hacia atrás, Alisa susurró algo y unas ramas rodearon el cuerpo del hibrido con facilidad, este gruño con rabia al sentirse prisionero, Hela rápidamente atacó su cabeza, dando unas pequeñas sacudidas hasta que logro separar la cabeza del híbrido al mismo tiempo que Alisa incendiaba el cuerpo, la bruja cayó al suelo de rodillas, completamente agotada.
-¿Hela verdad? Estoy bien... Creo, ya no siento las piernas-. Murmuró Alisa cuando Hela se acercó acariciar su rostro con su enorme cabeza.
-¿Cuándo terminaremos con esto? Muchos se han rendido y creo que quedan como diez híbridos-. Murmuró Alisa apoyándose del lomo de Hela para poder levantarse, pasando su mano derecha por su rostro, abriéndose un poco más una herida en su frente.
Hela solo empujó su nariz en su costado para luego ponerse en alerta cuando sintió el peligro acercándose, el lobo se agachó rápidamente haciendo que Alisa subiera a su lomo y se preparo para atacar al nuevo híbrido que venía corriendo hacía ellas, este estaba lleno de locura en sus ojos, la bruja extendió los brazos hacia los lados provocando que enormes rocas comenzarán elevarse en el aire para luego arrojarlos contra el híbrido que tuvo que frenar para cubrirse de aquel ataqué, Hela aprovecho para correr a toda velocidad, golpeando el abdomen del hibrido al mismo tiempo que Alisa saltaba del lobo para caer a la espalda del híbrido, rodeando con fuerza el cuello de este, el lobo negro lanzo una mordedura arrancando el brazo del híbrido que soltó un gritó de agonía.
