La vida es demasiado complicada aunque se aprende a vivir en ella, la vida de Natasha, Yelena, Kate, Wanda y familia cambiará en un solo segundo, las cosas que ellas apreciaban y amaban se les será arrebatado, aprenderán a vivir en su nueva realidad...
La vida es un desnivel, un subí y baja constante, no busquemos estabilidad, busquemos sobrevivir a esa maroma.
En la casa Carter-Bishop la pequeña Natalie corría al cuarto de baño con rapidez puesto que le andaba hacer pipi, Yelena río de su hija mientras seguía mezclando la harina en un recipiente.
-¿Por qué estamos grabando esto?-. Preguntó Kate quién tenía el celular grabando a su esposa.
-Por que es un proyecto de tu hija, quiere ser cocinera de grande, apoya amorcito-. Dijo Yelena alzando un poco la vista para ver a su esposa con una sonrisa, sin dejar de remover la harina.
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-Eso lo entiendo pero... ¿No era más fácil comprar el pan?-. Preguntó Kate alzando su ceja derecha.
-¡No mami! No sabrá igual, además le estoy enseñando a mamá a cocinar, no pienso volver a comer huevo revuelto y quemado-. Dijo la pequeña Natalie cuando regreso del baño haciendo que Kate riera y Yelena mirara indignada a su hija.
-Fueron los mejores huevos que hice en mi vida, grosera-. Dijo Yelena señalando a su hija quien le dio una pequeña sonrisa.
-No, mi amor... No fueron los mejores, has hecho mejores que los de ese día-. Dijo Kate apagando la cámara por unos momentos, así podría burlarse de su esposa.
-¿Y tú cómo sabes si no comes?-. Preguntó Yelena cruzada de brazos.
-Por que mi amor... No necesito comer para saber cómo sabían, tu hija escondía la comida en su servilleta cuando no veías-. Dijo Kate mordiéndose su labio inferior.
-¡Las odio! Ya no haré nada, quédense ustedes con su cocina-. Gruño Yelena alejandose de la cocina con paso veloz.
-¡No! ¡Mamá! No te vayas yo te amo-. Dijo la pequeña Natalie aferrándose a las piernas de su madre.
-No, déjame-. Dijo Yelena completamente indignada.
-Mi amor no te enojes, sabes que eres buenísima cocinando pero esa vez no salió como esperabas, anda... No seas así y prometo que está noche será inolvidable para ti-. Dijo Kate de forma coqueta, diciendo lo último en italiano para que su pequeña no entendiera.
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