La vida es demasiado complicada aunque se aprende a vivir en ella, la vida de Natasha, Yelena, Kate, Wanda y familia cambiará en un solo segundo, las cosas que ellas apreciaban y amaban se les será arrebatado, aprenderán a vivir en su nueva realidad...
Abrí un ojo escuchando que todavía Kate está en el cuarto de baño, arrugue la frente, me duelen las costillas pero creo que es un poco menos que ayer, me sentía frustrada conmigo misma por ser tan estúpida y dejar que mi odio y enojo se apoderará de mi, pero después de hablar con mis hermanos y madres sabía que tenía que dejar eso atrás, era solo pasado, necesitaba seguir adelante y es lo que haré, Kate es la que peor la está pasando, la persona que considera una madre perdió su brazo derecho en esta batalla.
-¿Kate?-. Pregunté confundida cuando escuché que algo se cayó del baño.
-¡Estoy bien! Ahorita voy-. Murmuró haciendo que frunciera el ceño.
Coloqué mis manos en mi estómago esperando que saliera pero... No lo hacía, algo no estaba bien y sentí algo extraño en mi estómago, ¿Qué está pasando? Ella no tarda tanto en el baño, así que tome toda la fuerza que tenía para levantarme de la cama, entre abrí la boca con dolor, sujetando mi estómago con la mano derecha, ¡Demonios! Dolía demasiado, apreté la mandíbula y tome varias respiraciones, necesitaba moverme, algo con mi novia no estaba bien y tenía que verla.
Me levanté con dificultad de la cama, me sujete de la pared y solté varias respiraciones como también maldiciones, luego comencé a dar un paso adelante, era difícil pero de todas maneras Clarke dijo que debía comenzar a caminar poco a poco, en realidad era un beneficio pero era doloroso, caminé hasta abrir la puerta del baño, Kate ni siquiera se dio cuenta de mi presencia, ella estaba mírando algo en sus manos, era como si estuviera en shock.
-¿Kate? ¿Qué pasa? ¿Qué es eso en tus manos?-. Pregunté confundida provocando que ella girara rápidamente en mi dirección dejando caer lo que sea que tuviera en las manos al suelo.
-¡Yelena! ¡¿Qué demonios estás haciendo aquí?!-. Gritó un tanto histérica con los brazos abiertos y mirándome desconcertada.
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-No te enojes mi amorcito, sabes que debo empezar a caminar, no lo he hecho en días, es muy doloroso déjame decirte, pero necesitaba hacerlo... Me tienes preocupada, llevas mucho tiempo en el baño y quiero saber... ¿Estás bien?-. Pregunté arrugando la frente, Kate abrió y cerró la boca varias veces.
-Yo... Creó que tienes que ver esto, ¿Sabes que te dije que me he sentido diferente estos días verdad?-. Preguntó Kate y yo asenti con la cabeza mírando como levantaba lo que tiro del suelo.
-Yo... Creo que estoy embarazada-. Murmuró Kate mostrandome lo que recogió, abrí la boca un poco confundida y luego miré lo que colocó en mi mano, era un test de embarazo donde decía su nombre y...
-¡¿Qué?!-. Grité un poco en shock sin creer lo que veía, mi corazón comenzó a latir como loco.
-Creo que estoy embarazada Yelena-. Volvió a decir mi chica con nerviosismo y yo me quedé callada por un segundo, analizando todo lo que estaba pasando aquí, pensé que tal vez estaba teniendo un momento a solas de dolor pero... ¡¿Embarazada?!.
