Episodio 20

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xXMaddie_CrazyXx reporta que...
...Maté a Sue antes de tiempo.
Me acabo de dar cuenta de que maté a Sue antes que el juego, así que ahora tengo que cambiar más cosas de las normales TwT. Esto es lo que vale un descuido a primera vista mínimo.
Pensé en cambiar un poco los caps anteriores para no matar a la pobre muchacha, pero la historia tomaría un camino distinto, así que ni modo.
Pero como sea. Disfruten del cap.



Esto era más de lo que podía aguantar. Han pasado demasiadas cosas en unos cuantos días. Ahora tiene a un asesino respirándole en la nuca, con su amor obsesivo y enfermizo, y a cuatro chicos a los que le interesa y viceversa. Eso contando que la vida de cada uno de ellos estaba en sus manos, había muerto gente, estaban rodeados de zombis 24/7, se estaban quedando sin provisiones, no dormía bien...

Vamos, que quería morirse en ese mismo momento.

Ahora debía encargarse del maldito de Lawrence ella sola, mientras intentaba no volver a cometer un error que les valiera la vida a ella y a sus compañeros, y al mismo tiempo debía intentar sobrevivir en el caos de mundo en el que vivían. Todo mal, marica, todo mal.

Se deja caer en una de las mesas de la sala 1-C, sintiendo que el peso de su existencia era demasiado en ese día en particular. Debían ir a la ciudad por comida ya que el almacén empezaba a vaciarse, sin mencionar que la ración diaria se hacía cada vez más pequeña y no querían morir de hambre. Suspira, viendo a Ethan sentarse en la mesa frente a ella, mirando cada uno de sus movimientos con atención, midiéndola con sus hermosos ojos azules. Lo mira devuelta y le lanza un guiño, encantándole verlo avergonzado y cómo intentaba disimularlo. Solo el pequeño gesto de desviar la mirada a la ventana con los hombros encogidos es suficiente para llenarla de energía vital.

Escucha unos pasos desordenados tras ella, y el sonido que hacen las uñas cuando las cortas. Al girarse, ve a Hailey dar vueltas, inquieta, mordiendo una de sus uñas con nerviosismo. Cuando sus ojos la encuentran, la castaña intenta ocultar su terror, mas no lo consigue. Es demasiado evidente que le tiene miedo.

—Separémonos en dos grupos—escucha al líder—. Uno saldrá a buscar, y el otro se quedará en la escuela. Díganme su preferencia y la tendré en cuenta—pide Lawrence, actuando amable.

Altas ganas de estamparle una silla en la cara.

No aparta la vista de la amiga de Scarlett, y sus miradas vuelven a encontrarse. Ella se da la vuelta, y jura verla temblar. Su comportamiento, aunque comprensible, la ponía de los nervios. Porque el verdadero asesino era la persona con la que, se supone, contaba. Pero Scarlett le había metido tanta mierda en la cabeza que ahora no confiaba en ella, aunque hablasen hace semanas y se hubiera soltado con ella.

—¡¿Puedes parar?!

Reconoce la voz hastiada de inmediato, y dirige su mirada a Eugene, al otro lado de la sala. Este se ve más que enfadado, con su rostro arrugado en ira mientras miraba a Hailey con fiereza.

—¡Lo que estás haciendo está comenzando a afectar a todos, ¿sabes?!—continúa el rubio.

La muchacha se sobresalta, y aparta la mano de su boca enseguida, parándose rígida como una tabla. Aunque aprecia que Eugene quisiera interrumpir su comportamiento ansioso, que en verdad empezaba a entristecerle, siente que no fue la manera, y enseguida lo detiene.

—No hace falta que le hables así, Eugene—dice, firme, aunque amable.

—No dije nada malo—se excusa el chico, bajando el tono de voz y cruzando sus brazos, relajando un poco su ceño fruncido.

—Debes cuidar tu tono—contesta—. No puedes solo gritarle así. ¿Y qué si está nerviosa? Es lo normal en una situación como la nuestra.

El ambiente en la sala se volvió tenso después del grito de Eugene. Incluso Lawrence se calló con su estallido. Empiezan una guerra de miradas, transmitiéndose todo y nada. Al final, el chico cede y descruza sus brazos con un suspiro de resignación, rascando su cabeza por debajo de la gorra. Mira a la castaña, que intentaba contener sus sacudidas y sus ganas de llevarse la mano a la boca.

Compañeros Peligrosos || Tú Y Todos. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora