***Rin***
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Mientras me dirigía hacia la puerta el timbre no dejo de sonar ni un solo instante, tuve que caminar un poco más deprisa, cuando llegué hasta ella la abrí y me sorprendió mucho el encontrar unas manos sujetando mi brazo, estuve a punto de lanzar un pequeño grito de no haber sido por la voz del señor Jaken.
-Lo siento mucho señorita Rin, pero necesito esconderte rápidamente- se dirigió hacia una de las habitaciones mientras me llevaba todavía sujeta del brazo.
-¿Qué pasa señor Jaken?- se veía agitado y su cara de preocupación estaba comenzando a asustarme.
-No puedo darle muchos detalles en este momento, pero, necesito que se quede aquí y no salga por ningún motivo- yo sentía mi corazón saltar y como estaba comenzando a subir el pánico. Estoy segura de que el señor Jaken se dio cuenta porque rápidamente trato de tranquilizarme suavizando su agarre en mi brazo y cuando volvió a hablar también su voz cambio de tono- Está subiendo la señora Irasue, no puede verla por ningún motivo- Jaken volteo a ver su teléfono al parecer un mensaje de texto, antes de irse me dedico una mirada y yo solo asentí mientras que él salía de la habitación.
Cuando me encontraba sola comencé a maldecir, muchas cosas pasaron por mi cabeza. Una de ellas y la cual era la más fuerte, era que no debí de haber venido aquí. Sesshomaru me había jurado que este lugar era seguro, al final de cuentas ¿Quién se atrevería a molestarlo? Pues bien, ahora me encontraba atrapada en una habitación. De pronto, recordé la plática que había tenido con él esta mañana y el porque me encontraba tan feliz hasta hace unos minutos.
Flashback (momentos antes)...
Cuando desperté lo primero que sentí fue una calidez cómoda y familiar, a pesar de que mis brazos no se encontraban debajo de las cobijas la persona que tenía a mi lado se encargaba de mantenerme caliente y ajena al frio que hacía. Nuestros cuerpos se encontraban entrelazados, pareciera que ya nos habíamos acostumbrado a ello, cuando voltee a ver su rostro estaba tranquilo, pocas veces lo veía dormir, debido a que siempre que despertaba él se encontraba ya despierto. Aun así mi contemplación de su agraciado rostro no duro mucho sintió que me había movido y sus ojos se abrieron para contemplarme.
-Buenos días- le dije mientras que me acurrucaba más a él, esta clase de cercanía me hacía sentir segura, jamás me había sentido así con nadie. Tampoco ninguna de mis parejas anteriores me habían hecho tan amorosa como con él, de alguna manera me sentía como otra Rin, definitivamente una Rin enamorada.
-Parece que la gatita ya no está más enojada- le lance un gruñido para que no siguiera por ese tema, la noche anterior habíamos tenido una discusión por Kohaku, una discusión que nos había llevado hasta su departamento y hasta la cama.
-No arruines esto- sentí donde él se rio, fue algo rápido pero su pecho se movió por unos segundos. Me dio un beso en la frente y después se enderezo hasta que quedo sentado en la cama, permitiendo admirar su torso desnudo.
-Ten- tomo de la mesa de noche unas pastillas y un vaso de agua. Vio mi cara de interrogación y continuo- analgésicos ¿o esta mañana no vas a quejarte?- su mirada era juguetona y yo tome la pastilla de mala gana, sabiendo que mi cuerpo protestaría por el movimiento.
-No me quejaría si fueras más...delicado- de nuevo vi asomarse una pequeña sonrisa, iluminando por unos segundos su rostro.
-Ahora soy yo el que no es delicado, cuando eres tú la que me pide que no me detenga- sentí los colores subir por mi rostro y estuve a punto de huir de ahí de no haber sido por sus brazos que se movieron más rápido, atrayéndome peligrosamente hacia él- pero puedo ser más delicado si eso deseas- su boca estaba en mi cuello, dejando pequeños besos y mi cuerpo estaba despertando poco a poco- ¿Quieres que te demuestre lo delicado que puedo ser?- ahora sus manos habían entrado al juego, acariciando lentamente mi cuerpo, dejando toda la piel erizada a su paso.
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SOLO BUSCABA UNA VIDA NORMAL
RomanceKagome Higurashi tiene 24 años y estudia su tercer año en la carrera de medicina. Trata de vivir su vida con un perfil bajo, ya que es lo que más desea. Pero le es imposible debido a su hermana mayor, Kikyo, una actriz famosa, reconocida por todas l...