Amanecer En Colores

9. Babosa Insoportable.

Habían pasado tres semanas. Tres semanas más en el internado. Tres semanas en la que mi madre, no se había reportado y ya me daba por vencida. No había hablado con Lyssa y tampoco con Gabe, por lo que en teoría se resumía a que me habían exiliado. Puta vida.

Semanas en la que Keith había intentado disculparse conmigo y yo me negaba en redondo, ignorándolo deliberadamente. Lo que había hecho, me había dolido.

Cameron, pasaba tanto tiempo junto a mí, que ya, hasta sus amigos del equipo de futbol americano, me trataban como una más, aunque no lograse recordar sus nombres.

Ethan se aprovecho de mi inclusión al equipo, para acercarse a Tessa y Sam había estado fuera en la última semana.

Miranda no me había acusado con el director, aun cuando esperaba una demanda y una nueva expulsión. Ya hasta me imaginaba la cara de Madeline, aunque creía que Keith había tenido algo que ver y el estomago se me revolvía de solo imaginarlo juntos.

Y yo había resuelto un pequeño inconveniente, con un asalto a la enfermería, que luego les contare.

Si. Si no nos meten a prisión antes.

Me dirigía al gimnasio, con Tessa a mi lado, quien no dejaba de parlotear acerca de lo lindo que era Ethan con ella, ya hasta estaba hastiada de Ethan y el pobre chico me había caído muy bien.

—Ay es tan lindo —suspiro, cuando abrí la puerta de mi casillero, en los vestuarios.

—¿Sabes que sería más lindo aun? —Pregunte mientras sacaba mi uniforme para cambiarme y ella me miro expectante a lo que pudiese decir— que dejaras de hablar de Ethan, durante un rato, lo vas a desgastar —ella me miro mal y yo sonreí.

—No seas cruel —dijo haciendo puchero.

—No soy cruel, solo digo que vas a desgastarle el nombre al chico.

—Vale, ya lo entendí —dijo rendida—. Es solo que, él es... —puse una mano en su rostro y ella guardo silencio.

—Lo sé, un encanto —dije haciendo ojitos y ella sonrió apenada.

—Vale, vale. No hablemos de mí. Hablemos de ti ¿ocurre algo entre Cameron y tú? los he visto pasar mucho tiempo juntos.

—¿Cameron y yo? —Pregunte confundida —¿eso si quiera va, en una misma frase?

—No te hagas la tonta Charlie.

—No lo hago. Entre nosotros no pasa nada, solo somos amigos. El me ha apoyado mucho. ¿Qué te hace creer que algo sucede entre ambos?

—Es lo que ha estado corriendo desde, la pelea con Miranda. Ustedes se fueron juntos.

—Serán cotillas, él solo me ayudaba. bastante lastimada termine.

—Peor quedo Miranda. ¿Cómo es que alguien tan pequeño golpea así? no lo entiendo. —la mire mal.

—Eso no tiene importancia ya.

—¿Y con Keith? —me tense.

—¿Qué sucede con él?

—Charlie, he visto como te mira y...

—¿Y qué esto, doctora corazón? —ella iba a responder, pero miró un punto a mis espaldas y gire.

Cotilla.

Calla, que tu también quieres saber.

Touché.

El antes mencionado, estaba junto a Miranda, muy juntos. Mi corazón comenzó una marcha veloz y la sangre comenzó a bullir dentro de mí. Apreté mis manos puños.